Para quienes cuidan la apariencia de su rostro, el exceso de brillo, los poros dilatados, las manchas oscuras, el tono irregular y la sensibilidad cutánea son las mayores preocupaciones. Todas ellas molestan principalmente porque, a pesar de la cuestión estética, pueden ser indicadores de enfermedades, de una mala alimentación o de hábitos insalubres.
Descartando enfermedades específicas, los factores más comunes de la aparición de manchas que dan un efecto de "sombra" o del brillo excesivo en el rostro son: la falta de hierro, de calcio, de vitamina A, E o B, la depilación facial y, la más común, la sobreexposición al sol.
Aunque existen cientos de productos para solucionar este problema y una lista extensa de remedios naturales para combatirlo, la desaparición de las imperfecciones no es inmediata y, en el mientras tanto, no es sencillo disimularlas con cremas o maquillajes, ni existe un producto eficaz para todos los tipos de piel. Para combatir esto, el laboratorio dermatológico de La Roche Posay lanzó al mercado una nueva BB Cream -Effaclar BB Blur- que en pos de tener efecto unificador anti brillo utiliza la tecnología Air Licium, una verdadera novedad en el mundo del cuidado de la piel.
Actualmente, más del 50% de las mujeres argentinas consideran que tienen piel grasa y buscan dentro de la amplia oferta del mercado, el producto que vaya mejor con su piel para evitar el brillo y corregir imperfecciones. El descubrimiento de los efectos en la piel de una novedosa y muy eficiente molécula podría cambiar la composición de las cremas unificadoras.
La no tan reciente aparición de las BB Cream (Blemish Balm, "crema para los defectos") o las CC Cream (Color Correction, de corrección de color) llegaron para facilitar el proceso de cuidado de la cara para muchas mujeres, ya que se trata de productos que logran el resultado que antes sólo se alcanzaba luego de la aplicación de múltiples cremas.
Se trata de un material que tiene su génesis en la NASA. Se utilizó por primera vez en la ciencia espacial como material aislante en la misión a Marte de 1997 y posteriormente como medio para capturar polvo interestelar en la Misión Stardust de 1999, gracias a su baja densidad y a la estructura de malla, que maximiza su capacidad de atrapar el polvo cuasi ilimitada.
Concretamente, el Air Licium es una nueva generación de activos que pueden absorber 150 veces su volumen en sebo. Se trata de un aerogel: un gel donde se sustituye el contenido líquido por aire, produciendo una espuma muy porosa con alta conectividad que tiene una estructura similar a la del poliestireno espumado (telgopor) pero con la solidez de un vidrio. En otras palabras, un montón de burbujas que forman un bloque con la apariencia de una gelatina, rellenas primero de líquido y luego de aire.
Esta molécula, entonces -que se compone un 99% aire y un 1% de silicio- es un material ultraliviano (de hecho, el material sólido más ligero que existe hoy en día) que provoca en la piel un efecto hidrofóbico que deriva en propiedades autolimpiantes. Además, es un material muy resistente y aislante térmico y acústico, que protege 39 veces más que la fibra de vidrio. En efecto, su uso industrial más difundido es su empleo como aislante térmico en las ventas de los edificios para evitar la pérdida de calor o frío.
La nueva revelación en las BB Cream presenta gracias a esta revolucionaria tecnología efectos impresionantes en la piel: es altamente matificante (por la eliminación de sebo), alisa poros e imperfecciones, unifica el tono, es resistente a los cambios de temperatura y tiene factor de protección solar.
Para comprobarlo, desde La Roche Posay testearon la molécula en condiciones extremas, como seis horas de sauna con 37°C y 60 % de humedad, y un día en Shangai (China) con 70% de humedad y 35°C, donde resistieron sin problemas los efectos de absorción. Quizás, si esta tecnología evoluciona y se perfecciona, cambie la cosmética femenina como la conocemos, y la molécula se convierte en el producto protagonista en la protección de la piel y correción de imperfecciones.