El fin del cepo cambiario, la negociación con los holdouts y las promesas del gobierno de Cambiemos de liberar el comercio internacional son algunas de las medidas que llevaron a la empresa de pagos online PayPal a volver a poner a la Argentina entre sus prioridades.
Es por ello que su director para Hispanoamérica, Federico Gómez Schumacher, visitó la semana pasada el país con el objetivo de aprovechar las "oportunidades" que le ofrece la coyuntura económica a esta compañía que cuenta con 179 millones de usuarios en todo el mundo y durante el 2015 fue intermediaria en operaciones por USD 282 billones.
Pese a algunas restricciones vigentes para realizar transacciones internacionales –es el core del negocio de la compañía-, los argentinos se las ingeniaron para posicionarse como el tercer mercado de PayPal en la región. Una muestra de ello es que el 85% de los millenials locales que compran en sitios extranjeros utilizaron esta herramienta de pagos durante el año pasado y la priorizaron sobre otros medios tradicionales como las tarjetas de crédito.
En una entrevista con Infobae, Gómez Schumacher habló del cambio de expectativas que generó el nuevo gobierno y de las posibilidades que podrían abrirse para los compradores y comerciantes argentinos en los próximos meses.
–¿Por qué en la Argentina no se puede utilizar PayPal para realizar pagos locales?
–Lo que estamos haciendo es ir por prioridades. La Argentina ha estado en la lista de esas prioridades, pero por temas regulatorios no ha sido tan fácil para nosotros. Vemos muy positivo el futuro. Las oportunidades han sido siempre las mismas, pero los cambios que vemos hoy están ayudando que volvamos a poner a la Argentina entre nuestras prioridades.
–¿Durante su estadía en el país tiene previsto reunirse con funcionarios del Gobierno?
–Nos estamos reuniendo con muchas personas. Estamos viendo una gran apertura en todo el mercado. Sí, la idea es tener muchas reuniones, pero en este momento no tenemos nada específico que comentar. Estamos muy ocupados.
–El gobierno anterior restringió el comercio internacional. La administración de Mauricio Macri prometió levantar muchas de las barreras que están vigentes. ¿Cree que esas políticas podrían mejorar sus negocios en la Argentina?
–Por supuesto. Definitivamente para nosotros ése es un tema importante. A pesar de que somos una empresa de tecnología, de pagos, trabajamos con el sistema financiero y tenemos que cumplir normas. Que haya promesas de que ciertas normas van a cambiar a nosotros nos genera una gran expectativa para poder ofrecer pagos domésticos.
Sin embargo nuestro negocio empieza por el comercio transfronterizo. Hoy si tú tienes una pyme en diez minutos puedes abrir una cuenta y recibir pagos de personas de todo el mundo, por ejemplo de un cliente chino que no tiene una tarjeta de crédito Visa o American Express.
–Pero un vendedor argentino no tiene la posibilidad de transferir los pagos que recibe en PayPal a su cuenta bancaria.
–Muchos usuarios que abren cuentas utilizan el mismo dinero que reciben para pagarles a sus proveedores. Una de las cosas que vamos a hacer ahora, porque algunas restricciones se han levantado, es abrir la capacidad para que los comerciantes argentinos puedan retirar fondos localmente. Hoy en día tienen que hacer los retiros en otros países, que no es lo ideal. Esa es probablemente nuestra prioridad número 1 para mí y para mi equipo.
–¿Cúales son los rasgos distintivos de los usuarios argentinos?
–Tienden a ser los más activos. Nos llama la atención que generalmente nuestros clientes de otros países concentran sus compras principalmente en los Estados Unidos. En cambio los argentinos tienden a dividir más. Los Estados Unidos son el mercado principal, pero representa menos del 20% del total de las operaciones. Asia es un proveedor interesante para los argentinos, también España.
El usuario argentino se ve más globalizado que otros y eso me da la idea de un consumidor más sofisticado, que utiliza las herramientas en línea para comparar precios y productos antes de comprar, incluso revisan el costo del envío y suelen elegir su compra en base a ello.
–Antes de que se aplicaran ciertas restricciones hubo un boom de compras a sitios chinos.
–En efecto. Hay sitios donde el costo del producto es muy bajo y ni siquiera te cobran el envío. Es increíble, pero ése es el modelo de negocios. En otros países las principales compras suelen ser descargas digitales, juegos, música... En la Argentina vemos que compran mucha ropa.
–¿Cúal es la relación entre PayPal y bitcoins?
–Es un tema muy interesante, sobre todo por la tecnología que está detrás del bitcoin. En los Estados Unidos a través de la plataforma de pago estamos ofreciendo a los comercios la posibilidad de que puedan aceptar bitcoins. Es algo muy nuevo que funciona sólo allí, pero nuestra idea es extenderlo. Todavía no vemos muy claro si el bitcoin va a ser la única criptomoneda o van a surgir otras, pero seguimos el tema de cerca.
–¿Cree que sistemas de pago como PayPal o las criptomonedas pueden reemplazar definitivamente el efectivo en el corto plazo?
–Es difícil saberlo. Lo que está muy claro es que el mundo de medios de pagos está cambiando muy rápido y la principal razón son los smartphones. Nosotros en PayPal vimos el último trimestre del año pasado que el 28% de las transacciones fueron hechas exclusivamente desde un móvil, lo cual es increíble. Esto está creciendo a un ritmo muy acelerado.
En el corto plazo no creo que desaparezca el efectivo porque tiene un valor muy grande; al efectivo no se le acaba la pila, no necesita ser conectado para utilizarlo y hay zonas donde no tienes conectividad completa. Falta infraestructura, pero el móvil está cambiando la forma en que los consumidores compran y esto se ve claramente en los millenials.