El presidente Mauricio Macri ordenó hacer tres "limpiezas energéticas" en su despacho en Casa de Gobierno, debido a frecuentes "dolores de cabeza" que padece cada vez que visita el salón que hasta su asunción ocupó Cristina Kirchner.
Según informó el diario Clarín, algunas de esas "limpiezas" tienen que ver con ritos religiosos y otras no.
"Las fuentes se negaron a revelar qué tipo de procedimientos se realizaron para la limpieza", pero contaron que "fueron distintas técnicas", reveló el matutino. Lo que también modificaron fue la aromatización de la oficina. "Ya no huele a vainilla y limón", informó el periodista Santiago Fioriti.
Para hacer la "limpieza", Macri habría consultado a su "maestra" con la que medita y habría realizado una tarea similar en la quinta de Olivos. Además cambió cuadros de próceres por obras contemporáneas.
Según fuentes anónimas de Casa Rosada "el lugar parecía un museo" y Macri buscó darle un aspecto "más moderno". El artículo de Clarín señala que desde la "limpieza energética" el Presidente no volvió a tener dolores de cabeza".