De este modo, la empresa que mantenía inactivos a unos 3.500 operarios podrá reiniciar la actividad productiva mientras prepara un plan definitivo de explotación por un año mediante la constitución de un fideicomiso.
"Básicamente la misma consiste en constituirse en operadores de la quiebra en una primera etapa de 30 días corridos de duración, con una inversión directa de hasta $20 millones, período durante el cual la firma tomaría la administración de los activos, mientras se avanza en la negociación de la etapa definitiva", escribió la jueza en una resolución de último momento.
En 30 días el consorcio de empresas presentará un plan de explotación de largo plazo
Según el escrito de la magistrada, en el período inicial de 30 días corridos, los operarios sólo cobrarían los Repro del Gobierno nacional, "mientras que progresivamente se irían incorporando los empleados necesarios para cubrir los puestos de trabajo generados por la explotación provisoria, cuyos salarios sí serían abonados por el fideicomiso a constituirse".
Cresta Roja empleaba antes de la quiebra a unas 3.500 personas en plena capacidad, con una faena diaria de 400.000 pollos.