El empleo público creció sustancialmente tras los doce años de los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner. Cuando el ex gobernador de Santa Cruz llegó al poder en el segundo semestre de 2003, el Poder Ejecutivo tenía bajo su cargo 240.553 trabajadores repartidos bajo las modalidades de contratación de planta permanente, transitoria y contratados. Hasta donde llegan los datos oficiales, ese número se elevó a 370.567 estatales para el mismo período del año.
Tras estos anuncios, la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) mostró su desconfianza con el plan de Cambiemos y convocó a un estado de alerta y movilización, ya que creen que habrá fuertes recortes de personal, y por lo tanto, pérdida de puestos de trabajo.
Daniel Catalano, secretario general de la seccional porteña del gremio, destacó que el sindicato "no va a ceder ni uno solo de los derechos adquiridos ni las conquistas de estos doce años". "Esto no nos sorprende para nada. Ya veníamos denunciando que si ganaba Macri esto era parte de lo que iba a pasar. Quieren romper la construcción política y cultural del Estado que se forjó en los últimos doce años", fustigó en una entrevista con Página/12.