Si hay comida chatarra, ¿hay noticias chatarra?

Dos expertos argentinos analizaron las preferencias de los lectores de sitios webs. ¿Deportes, entretenimientos, espectáculos, política o sangre e impacto?

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Eugenia Mitchelstein y Pablo Boczkowski son codirectores del Centro de estudios sobre medios y sociedad en Argentina. Decidieron relevar siete sitios webs nacionales (entre ellos Infobae) para conocer qué prefieren sus lectores a la hora de ingresar en el menú informativo considerando la cantidad de "clics" sobre cada nota, perfilando una especie de ranking de interés de los usuarios.

"Quisimos comparar lo que les interesa a los lectores respecto de la decisión de los editores a la hora de publicar. Esto ya lo habíamos hecho en distintos medios internacionales pero ahora lo hicimos con siete sitios argentinos", explicó Mitchelstein.

Boczkowski dijo que "hay sorpresa" en el resultado. "Los editores tienden a privilegiar noticias de política, de economía y de información internacional. Los lectores, lo hacen con deportes, espectáculos, noticias de crimen. Y esta disparidad de criterios es muy significativa", explicó.

Este dilema lleva a preguntarse cómo conciliar el deber de contar "lo que importa" y responder al reclamo comercial de conseguir más lectores y visitas. "Esto es un problema de todos los días. Antes existía pero ahora está muy presente", dijo la especialista. Además, aseguró que "suele ser un pacto con el diablo el sostener información de romances o de sangre para esperar que el lector entre por allí y se quede en el medio leyendo el resto".

Boczkoswki mencionó algunos nuevos fenómenos en este tipo de comunicación: "El periodista trabaja con la `tentación del clic´. Hay algunas empresas que pagan un bonus en dinero al comunicador que consigue más visitas, una suerte de empleado del mes, y esto sin dudas es un condicionante en toda la redacción", explicó. "Esto lleva a la 'comida chatarra de la noticia'. Se consumen mucho ciertas noticias, pero no necesariamente son las de mejor calidad", concluyó.

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