"El Estado Islámico quiere inculcarnos el miedo a la sospecha. El mejor remedio es la unidad nacional, debemos ser implacables ante el odio. No deben permitirse actos contra el islam o antisemita. Nadie debe usar la excusa del terrorismo", dijo el mandatario, luego de pedir a los alcaldes que desarticulen las células terroristas que pueda haber en sus municipios.
Hollande aseguró durante su discurso que "el blanco de los terroristas es la juventud de Francia". "Estamos en estado de guerra contra el terrorismo. El objetivo de los terroristas es sumir al país. Pero debe prevalecer la libertad", agregó.
"Debemos asegurar la unidad. Ya no hay nunca división partidista en los territorios. Debe haber un frente común para destruir al ISIS que lo ataque de manera decisiva con un espíritu de unidad de la comunidad internacional", manifestó, al tiempo que informó que Francia recibirá a 30.000 refugiados.
El presidente subrayó que el país que preside seguirá siendo un "lugar de libertad", aunque indicó que "el Estado debe estar al servicio de la seguridad de los ciudadanos. Por eso se fortalecerán las funciones de la Policía".
"ISIS quiere inculcar en sus actividades el veneno de la sospecha, de la tentación. No cedamos ante el temor. Debemos ser implacables ante todo tipo de odio", afirmó Hollande. Al final del discurso, los alcaldes cantaron junto al presidente La Marsellesa, al igual que 80.000 personas lo habían hecho en el encuentro del martes entre Inglaterra y Francia.