Tras los atentados en París que dejaron hasta el momento 132 heridos y más de 300 heridos, Francia respondió inmediatamente y atacó al Estado Islámico (ISIS) en la ciudad siria de Raqqa, el principal bastión de los yihadistas.
Los bombardeos franceses en Siria destruyeron el domingo por la noche un campamento de entrenamiento y depósitos de armas en el feudo del grupo terrorista.
Los aviones utilizados por el gobierno de François Hollande son modelos Rafale y Mirage que salieron de las bases francesas y norteamericanas en Jordania y Emiratos Árabes.
El caza Dassault Rafale son una de las construcciones más modernas diseñadas por la firma gala Dassault Aviation. Utilizado por primera vez el 4 de julio de 1986, varios expertos lo definen como el avión militar más potente del mundo.
Fue desarrollado como un caza multifuncional y universal, en versiones de cazabombardero y caza-interceptor. Su carga útil alcanza las 9,5 toneladas, superiores a las ocho de los cazas rusos Su-30.
Además de los Rafale, Francia utilizó tres Mirage 2000D y tres Mirage 2000N. Los primeros suelen ser utilizados para ataques convencionales, mientras que el segundo es una variante diseñada para ataques nucleares y es capaz de portar el misil nuclear Aerospatiale Air-Sol Moyenne Portee (ASMP).
"Por la noche hubo al menos 36 explosiones en Raqqa, algunas causadas por bombardeos aéreos, otras por explosivos", informó el lunes a la agencia AFP Rami Abdel Rahman, director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos, que dispone de una red de fuentes en Siria.
Entre los blancos, el OSDH citó la "brigada 17", un campamento de entrenamiento que alberga depósitos de armas. El director del Observatorio desconoce por el momento si hubo víctimas.