A horas de la marcha que familiares y amigos iban a hacer por su aparición con vida, efectivos de la Brigada de Cibercrimen de la Policía Metropolitana encontraron sana y salva a Layla Sainz Fernández, la adolescente de 13 años que era buscada desde el 22 de octubre.
Según trascendió, la joven se encontraba sola en la Plaza del Ángel Gris, en Calcena y avenida Avellaneda, cuando fue vista por efectivos de la Metropolitana que recibieron un llamado al 911. Hacía 12 días que sus familiares no sabían nada de ella y que la buscaban desesperadamente. Su desaparición era vinculada con uno de sus contactos de Facebook.
De acuerdo a lo informado por fuentes policiales, la menor aparentaba encontrarse en situación de calle y no se descarta que haya dormido en la plaza. Layla fue trasladada a la fiscalía de Pompeya donde tendrá que explicar los motivos por los que se ausentó del hogar.
La última vez que Layla se conectó a internet fue el jueves 22 de octubre, a las 14:30 desde un ciber de la calle San Juan de la Villa 1-11-14, donde vive junto a su familia, que se mostró desesperada pidiendo ayuda en varios medios de comunicación.
Pese a la noticia de su hallazgo, maestros, compañeros y vecinos mantendrán la concentración que tenían planeada para este mediodía en Acoyte y Rivadavia para exigir que se investiguen redes de pedófilos que actúan mediante redes sociales. Las sospechas se debieron a que Layla fue la cuarta chica del Bajo Flores que desapareció tras chatear con un extraño.
Toda la investigación sobre su desaparición estuvo ligada a una supuesta organización de pedofilia y trata que estaría operando mediante las redes sociales. De hecho, los docentes de la Escuela Normal Superior N° 4 denunciaron que "desde hace meses, varias jóvenes de distintas escuelas de la zona sur de la Ciudad contaron que estaban siendo amenazadas a través de redes sociales".