La velocidad y prestaciones de infarto han estado íntimamente ligadas al mundo del automóvil desde el nacimiento de los mismos allá por fines del siglo XIX. Las viejas carreras eran verdaderas aventuras que sólo estaban al alcance de los más pudientes, quienes disponían de los recursos y el tiempo para dar los primeros pasos en el automovilismo deportivo.
Esta fascinación por la velocidad sigue más vigente que nunca con autenticas obras de arte sobre ruedas de fabricantes como Ferrari, Lamborghini y McLaren que generan asombro y despiertan sensaciones de deseo aun entre aquellos completamente indiferentes al mundo de los automóviles.
Hasta no hace mucho manejar cualquiera de estos superdeportivos estaba completamente fuera del alcance de la mayoría de los mortales. Pero con la democratización del lujo, así como las mujeres pueden rentar vestidos y joyas de los mejores diseñadores para algún evento especial, los hombres ahora pueden alquilar y manejar, aunque sea por unas horas, el vehículo de sus sueños.
Fue aquí en Miami donde Max Keglevich, CEO de Miami Classics Garage vio una oportunidad de negocios y decidió abrir su empresa de alquiler de autos exóticos, fruto de su pasión personal por el mundo del automóvil.
"Miami es un lugar exótico y la idea es que la gente venga a disfrutar estos autos que en sus países no los pueden disfrutar. El rango de edad de los clientes es de entre 35 y 45 años, es gente que los usa para salir a comer o ir a la playa. También los alquilan para reuniones en donde es muy importante la imagen que uno refleja".
Vehículos de constructores exclusivos como McLaren, Porsche, Rolls Royce y Ferrari entre otros se encuentran disponibles para alquiler por un período que va desde las 24 horas hasta un mes o más si el cliente lo desea, y puede pagarlo.
El más "accesible" es un Corvette Stingray que arranca en los $250 dólares por día llegando a los $3500 de un Lamborghini Aventador, unos de los autos más deseados hoy día. "Tenemos gente que desea manejar un Ferrari o un Lamborghini y ahorran durante todo el año para llegar a tener dos o tres días el auto de sus sueños. Son fanáticos que saben absolutamente todo del auto, cuantos caballos tienen, quien los fabricó, cuantos se hicieron".
Toda esta fascinación colectiva por los automóviles deportivos explica en parte por qué las acciones de Ferrari subieron un 5,77% en su debut en Wall Street. El constructor italiano Ferrari limita voluntariamente su producción a 7.000 coches de nueve modelos y tiene previsto aumentar su producción a 9.000 unidades. El modelo más accesible, similar al que tuve oportunidad de manejar, tiene un valor aproximado de 200.000 dólares.
Para adquirir un Ferrari hay largas listas de espera y el 60% de los automóviles está reservado a quienes ya son propietarios de uno. El 34% de los clientes Ferrari tiene más de uno. Para la gran mayoría que no puede acceder a sus vehículos, la marca ofrece productos derivados como relojes, aparatos electrónicos y otros accesorios con su emblema los cuales son un verdadero éxito comercial a nivel mundial.