Todo estaba planificado. Los violadores, de unos 20 años, ya habían resuelto qué y cómo hacerlo. Lo único por definir era la víctima.
Estuvieron un tiempo en la puerta del bar, en la madrugada del 31 de julio. Hasta que apareció la candidata ideal.
La mujer, de 34 años, se había juntado con amigos, pero salió sola. Le costaba mantenerse en pie de tanto que había tomado.
Uno de los agresores se acercó y le preguntó a dónde iba. Ella dijo que buscaba la estación Moor Street, pero que no sabía bien cómo llegar. Muy gentilmente, él se ofreció a acompañarla.
Esa caminata quedó registrada por las cámaras de seguridad. Iban abrazados, casi como si fueran novios. De atrás los seguía el segundo agresor, un joven de gorra.
El destino final fue un basural ubicado a pocas cuadras del lugar en el que se grabó el video. Allí la violaron salvajemente.
En la parte final de la secuencia se puede ver a los atacantes abordar el autobús 97a en Bordesley Green. Viajaron hasta Park Street.
La policía de West Midlands difundió las imágenes recién este 23 de octubre. Espera que sirvan para identificar a los responsables.