No vengan a decir que la realidad supera la ficción. Llegó la fecha de visita de Marty McFly al futuro y todavía no existe el vehículo con el que los fans de la película sueñan desde hace tres décadas: no, no es el Delorean (Stephen Hawking ya descartó que la humanidad pueda viajar al pasado, mucho menos en un auto). Hablamos del "Hoverboard", el skate volador con el que el personaje de Michael J. Fox hizo comer estiércol a Griff Tannen.
En 1985 no sonaba tan imposible que para esta fecha existiera algo como una patineta que flota, pero la ciencia no lo ha logrado aún. A lo largo de las años muchas compañías han desarrollado tecnología para intentar crear algo similar, pero ninguna se ha acercado a lo que vimos en la película.
De hecho, lo más cercano fue una cruel broma de Funny or Die en la que, mediante efectos especiales, simularon el lanzamiento del producto con una publicidad en la que actuaron Christopher Lloyd (¡El Doc!), el prócer del skate Tony Hawk y Moby, entre otros. Todos pretendiendo usar el hoverboard en un skatepark de Los Ángeles.
El portal más tarde publicó un video con Lloyd pidiendo disculpas por la broma. ¡Es un tema sensible!
El 24 de junio de 2015, la empresa Lexus lanzó un video anunciando la creación de una verdadera aerotabla. Se dijo que el artefacto usaba superconductores enfriados por nitrógeno líquido y un sistema de imanes. El video mostraba al aparato desplazándose sobre una superficie convencional de asfalto y ahí estaba la patraña. La empresa admitió más tarde que su aerotabla solo funciona en superficies metálicas especialmente diseñadas. ¿Es un avance? Sí, pero todavía el futuro imaginado queda lejos.