Guzmán aparece recostado en su cama. Luego se oyen los golpes de un martillo neumático en al menos cuatro ocasiones y en un lapso de cuatro minutos. El Chapo camina hacia la letrina, se escucha tierra que cae y a dos hombres que hablan. El preso regresa a su cama, se cambia los zapatos y se va tranquilamente. Así se fugó el 11 de agosto el líder del cártel de Sinaloa, el capo narco mejor custodiado del mundo.
Noticieros Televisa difundió el video con audio de las cámaras de seguridad que controlaban la celda número 20 del penal de El Altiplano. El Gobierno mexicano ya había presentado algunos fragmentos en julio, pero la falta de audio no permitió identificar el sonido del martillo neumático.
Pese al estruendo, el personal de monitoreo no pareció percatarse de que algo andaba mal en la celda. Televisa puso también al aire el diálogo que el policía enviado a la celda del Chapo mantuvo con su jefe.
Habían pasado 25 minutos desde que el Chapo entrara al túnel cuando un penitenciario avisa por radio que había un huevo en la letrina.
"Aquí hay un hoyo grande, comandante, muy grande"
"Jefe, hay un hoyo en la regadera, en la coladora de la regadera", avisa nervioso el guardia. "¿De qué tamaño?", le pregunta el supervisor. "Grande, comandante, grande", responde el policía. "Oye, pero ¿el interno no está ahí?, dice el jefe. "No, comandante, no está".
Según diversas investigaciones, al Chapo le tomó 15 minutos recorrer el túnel de 1,5 kilómetros hasta una obra en construcción en la colonia Santa Juanita, en Almoloya de Juárez, en el Estado de México.
Joaquín Archivaldo Guzmán Loera escapó, por segunda ocasión, de una prisión de máxima seguridad en México tras haber sido recapturado el 22 de febrero de 2014. A tres meses de aquella fuga, permanece prófugo.