"A las 00:21, cumpliendo una orden del tribunal, Kelly Gissendaner fue ejecutada según la ley. Ella realizó una última declaración y solicitó que se le permitiera rezar", anuncio a la AFP Gwendolyn Hogan, vocera de la administración penitenciaria del Estado de Georgia (sureste de los EEUU).
La junta de Indultos y Libertad Condicional de Georgia había denegado el martes suspender la ejecución.
"La comisión rechazó el pedido de revaluación de su decisión anterior, que descartó clemencia para Kelly Gissendaner", dijo el vocero de esta junta cuatro horas antes del momento previsto para la ejecución.
La ejecución tiene un significado particular, ya que se realiza cinco días después del pedido realizado por el ex cardenal argentino en el Congreso de Washington para abolir la pena de muerte.
El martes, el representante del Vaticano en los Estados Unidos, Carlo Maria Vigano, hizo un "llamado urgente" en nombre del papa Francisco para conmutar la pena de Gissendaner.
"Sin querer desestimar la gravedad del crimen por el cual Gissendaner fue condenada, estando siempre con las víctimas, de corazón, le imploro, sin embargo, conmutar esta sentencia en una pena que se traduzca en justicia y piedad a la vez", escribió.
Kelly Gissendaner, de 47 años, es la decimosexta mujer en ser ejecutada desde que la Corte Suprema restableció la pena capital en 1976.
Ella fue condenada por haber realizado un complot con su amante para asesinar a su marido en 1997.