Lionel Messi tendrá para varias semanas de recuperación luego de lesionarse el ligamento colateral de la rodilla izquierda el fin de semana ante Las Palmas, aunque igualmente tomó la decisión de salir de su casa y dirigirse al Camp Nou para alentar al Barcelona en el duelo de la segunda jornada ante Bayer Leverkusen.
El conjunto "blaugrana", que arrancó la campaña continental con una igualdad ante Roma en Italia, deberá hacerle frente a la ausencia del mejor jugador del mundo, quien sorprendió a propios y extraños en los pasillos del estadio de la entidad catalana con la férula, las muletas y una movilidad limitada. Si bien zafó de la intervención quirúrgica, no podrá trasladarse con normalidad por unos cuantos días.
El astro rosarino arribó al estadio acompañado por Pepe Costa, el manager del club, con quien lo une una relación de amistad.