La presidente de Chile, Michelle Bachelet, anunció que viajará a la zona más afectada por el terremoto que la noche de este miércoles se produjo en gran parte del centro y norte del país y que ha ocasionado, al menos, ocho muertos.
"La Onemi (Oficina Nacional de Emergencia) está haciendo informe de daños, hemos tenido información parcial, la estamos recopilando para tener una imagen más clara", precisó Bachelet, quien esta vez no ha declarado el estado de excepción, como ha ocurrido en otros sismos recientes.
"Estamos evaluando si ameritaría un estado de excepción. Hasta ahora creemos que no sería necesario. No obstante, se va a declarar zona de catástrofe, lo que nos permitirá ofrecer ayuda más rápidamente", apuntó.
Personal de las Fuerzas Armadas y Carabineros, apoyados por helicópteros, están supervisando la zona afectada para determinar la magnitud del daño ocasionado por el movimiento telúrico, que afectó sobre todo a las regiones de Valparaíso y Coquimbo, en el centro norte del país.
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"Las medidas fueron tomadas muy rápidamente, el foco fue la protección de las personas y la evacuación de las zonas costeras", detalló la presidente, quien recalcó que la decisión fue adoptada ante el riesgo de tsunami -ya levantado- provocado por el sismo de 8,4 grados de intensidad, que se registró a las 19:54 hora local (22:54 GMT).