La elección del veterano diputado izquierdista Jeremy Corbyn como nuevo líder del Partido Laborista británico provocó una fuerte polémica al calificar a grupos terroristas como Hezbollah y Hamas como sus amigos.
Asimismo, la victoria de Corbyn, quien se impuso cómodamente con un 59,9% del apoyo de los miembros su partido, tendrá consecuencias en las relaciones del laborismo con Israel y con la comunidad judía de Gran Bretaña debido a sus reiteradas críticas a ese país.
Incluso el flamante líder laborista es un fuerte defensor de la causa palestina y hasta reveló que ha mantenido encuentros con miembros de los grupos terroristas de Hezbollah y Hamas.
Tradicionalmente la comunidad judía apoya al laborismo. Pero con la llegada de Corbyn se especula que gran parte de de ese electorado pase a los conservadores o a un nuevo partido de centro.
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Entre algunas de las posiciones que buscará impulsar, el flamante líder laborista se opone a las políticas de austeridad del gobierno británico y a la permanencia del Reino Unido en la OTAN.
Según consigna el portal Aurora Israel, una encuesta publicada por el diario Jewish Chronicle reveló que el 70% de los judíos británicos estaban preocupados con la posibilidad de que Corbyn fuera elegido como líder del partido.
Y el 80% expresó preocupación por las potenciales políticas exteriores del dirigente izquierdista y sus vínculos con los negadores del Holocausto.
Recientemente, el flamante líder laborista desató una fuerte polémica al calificar como "tragedia" el asesinato del ex líder de Al Qaeda Osama bin Laden.