El Gobierno canadiense igualará las contribuciones donadas a entidades de caridad registradas hasta un máximo de 100 millones de dólares canadienses (75,43 millones de dólares).
"Estos fondos serán usados para ayudar a cubrir las necesidades básicas de personas afectadas por conflictos en la región, incluyendo techo, comida, salud y agua, así como también protección y educación de emergencia", dijo Christian Paradis, ministro de Desarrollo Internacional, en una conferencia de prensa en Ottawa.
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"El fondo también será usado para entregar ayuda en algunos países de tránsito para los refugiados", agregó.
De esta manera, el gobierno canadiense responde a las críticas internacionales tras la aparición del cuerpo de Aylan, un niño sirio de 3 años, en una playa turca y luego que la tía del menor denunció que la familia quería emigrar a Canadá.
A su vez, el ministro de Defensa de Canadá, Jason Kenney, en una entrevista con la radio CBC, dijo que el gobierno aplicará más medidas, incluyendo la vía rápida para la relocalización de refugiados sirios en el país y que se concentrará en acelerar el proceso para las minorías religiosas y étnicas en la región.