El pasado 5 de agosto, durante la cadena nacional Nº 31 del año, la presidente Cristina Kirchner esbozó su interpretación de la historia del siglo XX: "¿Hitler llegó saben por qué? Porque habían humillado a Alemania, no producto de la inflación. Fue la consecuencia de las condiciones que los aliados impusieron a la Alemania vencida en el Tratado de Versailles".
Las declaraciones de la mandataria despertaron la polémica porque, para algunos, rozaban la justificación del nazismo. Además, en la edición de hoy del diario Clarín, Alejandro Corbacho, director del Departamento de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales de Ucema, puso en duda la interpretación de la Presidente, argumentando que "la historia académica lo superó al demostrar claramente su insuficiencia para explicar la tragedia que asoló a Alemania y luego al mundo en los años treinta".
"Los líderes políticos recurren a las lecciones de la historia para justificar o defender sus acciones", dice Corbacho, y agrega que "los expertos sostienen que aquellos que recurren a contar la historia con esa perspectiva (...) muestran una gran confianza en sus afirmaciones y carecen de inhibición para utilizar el pasado (...) en formas diferentes, aunque sepan poco del tema".
Para la mandataria, sin embargo, Corbacho "tampoco entiende nada" y "lo que es más grave, tampoco sabe sobre lo que escribe y publica". Tras agradecerle "por lo de líder político", sostiene que al académico "se le escapó la tortuga".
En su apoyo, Kirchner citó un fragmento de Las consecuencias económicas de la Paz, de J.M. Keynes, y recordó su participación en las negociaciones para el Acuerdo de Bretton Woods. "Keynes tenía una propuesta, que se la conoció como la propuesta de Inglaterra (él representaba a ese país) de crear un sistema monetario donde no hubiera una sola moneda de reserva porque eso alteraría el equilibrio económico global al generar desigualdades que afectarían a los países mas débiles. La otra postura de Bretton Woods la sostenía el representante de los EEUU, Harry White, que proponía un sistema que terminó entronizando al dólar como la moneda mundial más poderosa. Te imaginarás quién ganó. Harry 'Green' White", sostuvo la mandataria.
Para finalizar, Kirchner dijo que tras la muerte de Keynes, "otra vez volvió a ocurrir lo que él predijo. Una sola moneda provocaría desequilibrios en la economía mundial. Keynes entró en la historia de la economía mundial. De Harry 'el verde', no se acuerda nadie, aunque el mundo sufra las consecuencias de lo resuelto. ¿Vos decís que de Corbacho tampoco se va a acordar nadie? Es lo menos importante, pero cuánto mejor nos iría a los argentinos si algunos leyeran y supieran más de lo que escriben y hablan".