Como ya ocurrió en los 100 metros, el jamaicano Usain Bolt venció holgadamente al estadounidense Justin Gatlin y consiguió una nueva medalla en el Mundial de Atletismo. El Rayo se quedó con el oro en la prueba de los 200 metros con un tiempo de 19:55 segundos, sobre 19:74 que hizo el norteamericano.
A pesar de la ventaja del estadounidense en las rondas previas de estos 200 metros, el jamaiquino siempre es favorito. Y no decepcionó. Dio un espectáculo ante el público presente en el 'Nido de Pajaro', como se conoce al estadio de Pekín. Otra vez la misma pista, otra vez los mismos protagonistas y otra vez triunfo de Usain Bolt.
En la segunda semifinal, Gatlin cruzó por línea de meta con enorme suficiencia y un tiempo de 19:87 segundos. Su paso por la curva fue espectacular y ya en los metros finales se dejó ir reservando energías para el momento de la verdad. Unos minutos más tarde, Usain Bolt controló a sus rivales a placer para firmar un tiempo de 19:95.
El domingo, en la final de los 100 metros, Bolt ganó con un tiempo de 9.79 segundos por 9.80 del estadounidense, suspendido dos veces por dopaje y de vuelta en las competiciones tras cumplir una sanción de cuatro años. La nueva prueba no fue la excepción y Bolt logró demostrar que es el hombre más rápido del planeta.
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De esta forma, Bolt consiguió su sexto oro consecutivo en esta disciplina, tras los dos de los Juegos Olímpicos (Pekín 2008 y Londres 2012) y los tres en Mundiales (Berlín 2009, Daegu 2011 y Moscú 2013). Además, fue su décimo oro mundial, más que nadie en la historia (16 títulos).
Atrás quedaron los méritos de Gatlin, quien aterrizó en la capital china con 26 victorias seguidas y la mejor marca del 2015. Usain Bolt, el plusmarquista mundial de la distancia (19:19 segundos en Berlín 2009), aún se mantiene en el trono de la velocidad.