La medida está destinada a impulsar el uso de la cuenta bancaria por todos los trabajadores, los registrados en el Sistema Integrado de Jubilaciones y Pensiones y también los informales.
Para eso, en la reunión de directorio del Banco Central de la República Argentina se resolvió que "en adelante, los montos máximos de acreditaciones y saldo diario en la Cuenta Universal Gratuita serán equivalentes a cuatro veces el valor del Salario Mínimo, Vital y Móvil", el cual es desde enero de 4.716 pesos.
De esta manera, se incorporó un criterio de ajuste automático para los montos en cuestión. En los últimos años el SMVM fue actualizado en enero y entre agosto y septiembre.
Además, fuentes de la entidad rectora indicaron que "a partir de ahora con la apertura de la Cuenta Gratuita Universal, las entidades financieras deberán entregar de manera automática y sin trámite previo una tarjeta de débito".
El Impuesto a los Débitos y Créditos Bancario desalienta la bancarización
Hasta el momento, la Cuenta Gratuita Universal admitía que el total de acreditaciones –depósitos en efectivo, cheques o transferencias no debía superar un monto fijo mensual, establecido oportunamente en 10.000 pesos. Ese criterio se modificó en los términos descriptos anteriormente.
La medida forma parte del Plan Nacional de Bancarización Inclusiva que busca profundizar la inclusión financiera y avanzar con transformaciones para otorgar más derechos y beneficios a amplios sectores de la población, especialmente a los segmentos más vulnerables. Sin embargo, un factor que conspira contra la formalización de todas las operaciones financieras es la vigencia del Impuesto a los Débitos y Créditos Bancarios de 1,2 por ciento de los depósitos no asociados a transferencias interbancarias.
La Cuenta Gratuita Universal fue creada a través de una resolución del BCRA en 2010 con el objetivo de extender la bancarización, facilitando el acceso a los distintos medios de pago disponibles distintos al efectivo. No tiene costos de emisión y está disponible para las personas que no tengan otra cuenta bancaria y que sean mayores de edad. Las entidades financieras que posean en su red más de 10 cajeros automáticos están obligadas a ofrecer esta cuenta al público y a otorgarla con la sola condición de que el solicitante presente su DNI.