"Necesitamos de más Mercosur, no hay que aislarse"

El embajador brasileño en Buenos Aires, Everton Vieira Vargas, reconoció que las relaciones al interior del bloque comercial del Mercosur no se encuentran en su mejor momento, pero aseguró que la respuesta no es que los países miembros se aíslen, sino que busquen soluciones en conjunto. "Debemos sin lugar a dudas revitalizar el Mercosur, que todavía no es un proyecto paralizado, es una iniciativa ambiciosa y estratégica. Necesitamos de más Mercosur. La solución no será salirse o aislarse uno del otro", aseguró el diplomático en un evento organizado la semana pasada por la Fundación de Estudios Políticos, Económicos y Sociales para la Nueva Argentina (Fepesna).

El desacuerdo con respecto a un tratado con la Unión Europea es uno de los conflictos. Además, la Argentina ha traído varios dolores de cabeza al bloque regional, que comenzó a funcionar en 1994. Tanto Brasil como Uruguay elevaron su voz de protesta ante la que han calificado como una política proteccionista por parte del país vecino. Desde la oposición al gobierno de Cristina Kichner, se critica el aislamiento y las restricciones que impiden el pleno funcionamiento del bloque.

"Ninguno de los países miembros del Mercosur se va a bajar; no es un club al que uno entra y sale sin costos. Pero para dinamizar esta relación en el mundo, tenemos que profundizar primero la relación entre nosotros", insistió Viera Vargas durante el encuentro, del que participaron el diputado del PRO Federico Pinedo, el ex presidente del Banco Central (BCRA) Martín Redrado y la presidente de Fepesna, Laura Velazquez.

"Hay presencia de 130 empresas brasileñas, con u$s7.000 millones de inversión"

Vieira Vargas resaltó la voluntad brasileña de mantener el vínculo bilateral y destacó que Argentina es parte integral del proyecto de desarrollo de Brasil. "Hay presencia de 130 empresas brasileñas, con 7.000 millones de dólares de inversión y la generación de 50.000 empleos directos en la Argentina. Esto es el mayor patrimonio entre ambos países", afirmó. El diplomático también hizo hincapié en que Brasil y la Argentina tienen la posibilidad de enfrentar e insertarse en el cambiante escenario internacional con una cooperación más profunda en comercio, educación y tecnología. En ese sentido, apuntó que el gobierno de su país tiene "mucha paciencia", aunque recordó que hacen falta resultados.

Más allá de su relación, Argentina y Brasil se encuentran en dos contextos particulares. Por un lado, la Argentina definirá en octubre de este año al sucesor del kirchnerismo. Por el otro, Brasil está adoptando medidas urgentes para enfrentar la desaceleración económica. "Es un momento de cambios, en el que buscamos reorientar los gastos públicos corregir los desequilibrios internos. Esto va a exigir una nueva economía", indicó el funcionario.

Ante esta situación, Vieira Vargas reiteró que se debe pensar en conjunto en el corto, medio y largo plazo y recordó que en 2011 el comercio entre ambos países tuvo un potencial de 40.000 millones de dólares. "A largo plazo tendremos que trabajar con un escenario internacional que no es fácil porque la economía global está en bajo crecimiento", subrayó.

El acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea

El acuerdo entre ambos bloques económicos es esperado desde hace tiempo a ambas orillas del Atlántico y, desde hace varios meses, Brasil, Uruguay y Paraguay presionan para alcanzarlo. El gigante sudamericano es el quinto mayor inversor de la Unión Europea y, en tanto bloque, es su principal socio, si bien el mayor flujo de intercambios es con China. No obstante, la Argentina y Venezuela han puesto sus objeciones. La falta de avances llevó a que algunos políticos llegaran a sugerir que cada país negociara con la UE por separado. Finalmente, se espera que haya una negociación antes de que termine el año.

Vieira Vargas matizó las diferencias dentro del bloque: "Un acuerdo UE-Mercosur no es algo que se vaya a concretar si intercambiamos ofertas a fin de año. Lo que va a resultar es que tengamos una negociación equilibrada y por eso es muy importante que la UE también haga una oferta aceptable. En el Mercosur, tenemos una oferta y respetamos las sensibilidades de la Argentina en esta materia. Es necesario tener una mirada política sobre esto y ver si verdaderamente la UE tendrá la voluntad y el interés y hará el esfuerzo para lograr un acuerdo que sea mutuamente benéfico entre ambos bloques".

"La Alianza del Pacífico no es un competidor, es un complemento"

Por otro lado, el embajador brasileño pidió que el Mercosur también mire hacia la Alianza del Pacífico, integrada por Chile, Perú, Colombia y México. "Tenemos la oportunidad de sacar provecho de la relación con la Alianza del Pacífico, que no es un competidor, es un complemento y es así como debe ser visto, y yo creo que esta es también la misma voluntad de los países que integran esta asociación", consideró.

El futuro del gobierno de Dilma Rousseff

Durante su presentación, el embajador brasileño mencionó que la gobernabilidad ante la incorporación de nuevos sectores a las clases medias que exigen mejoras en los servicios y la erradicación de la pobreza y la desigualdad son los desafíos actuales que enfrenta América Latina y, por lo tanto, también Brasil. "Hoy hay una mayor presión por mejores servicios públicos, por un mejor funcionamiento de las instituciones. Esto lo conocimos en Brasil con la incorporación de 40 millones de brasileños a la clase media, que cambió la fisonomía del país", explicó.

Infobae consultó a Vieira Vargas acerca de las protestas en el país que comenzaron con una exigencia de una mayor inversión en educación, salud y empleo durante la Copa Confederaciones de 2013 y que hoy, en ciertos sectores, mutó al pedido de destitución de la presidente Dilma Rousseff, quien asumió su segundo mandato hace medio año. De hecho, según una encuesta de Datafolha, la imagen de la jefa de Estado cayó al 10% de aprobación. "

La popularidad de la presidente es parte del proceso político, así como cayó puede volver a subir", dijo y negó que el sondeo publicado la semana pasada sea motivo de preocupación:

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