Estados Unidos publicó, el jueves, su informe anual sobre derechos humanos en el mundo, en el que apuntó con dureza a la situación de Cuba, Venezuela e Irán.
Pese al deshielo de las relaciones entre Cuba y los Estados Unidos, que fue sellado meses atrás por un encuentro entre Barack Obama y Raúl Castro; el Departamento de Estado volvió a insistir con las denuncias sobre la violación sistemática de los derechos humanos en la isla.
De acuerdo con el subsecretario de Estado para los Derechos Humanos, Tom Malinowski, el reporte no contradice el acercamiento diplomático hacia Cuba iniciado en diciembre porque "relacionarse no es lo mismo que respaldar".
"Relacionarse con Cuba no es lo mismo que respaldarla"
"La situación necesita mejorar bastante antes de que cualquiera de nosotros pueda decir que estamos donde queremos estar", dijo el funcionario durante una conferencia de prensa. "Pero creemos que lo que hemos hecho es quitarle al gobierno cubano la posibilidad de decir que los problemas en la isla son culpa de Estados Unidos y poner el énfasis donde corresponde: en sus acciones y políticas".
Según el informe, en Cuba, donde Washington espera abrir este año una embajada por primera vez en medio siglo, han sido casi 9.000 los ciudadanos sometidos arrestos temporales y arbitrarios durante los últimos cinco años, lo que constituye una cifra récord.
Por su parte, sobre Venezuela, el documento manifiesta que las fuerzas de seguridad y grupos progubernamentales violaron los derechos humanos de manifestantes en varias ciudades de país, entre febrero y mayo de 2014. El informe registró denuncias del uso de la fuerza para disolver las protestas, detenciones arbitrarias y tortura y agregó que el gobierno usó el poder judicial para enjuiciar a líderes opositores
Washington ya había sancionado, en marzo de 2015, a siete funcionarios del gobierno de Nicolás Maduro acusados de violar derechos humanos durante las manifestaciones que dejaron 43 muertes en 2014.
Sobre la situación en Medio Oriente, el informe fustigó el jueves a Irán por las graves restricciones a libertades fundamentales, como las de expresión y de culto.
"Irán continúa limitando gravemente las libertades individuales, como la libertad de reunión, de expresión, de religión y la libertad de prensa"
"Irán continúa limitando gravemente las libertades individuales, como la libertad de reunión, de expresión, de religión y la libertad de prensa", denunció el Departamento de Estado en el documento.
El informe se publica en momentos en que Washington y Teherán sostienen una negociación en conjunto con un grupo de potencias occidentales para alcanzar un acuerdo sobre el programa nuclear iraní.
Estados Unidos, donde también se aplica la pena de muerte, criticó además a la República Islámica por tener "la segunda mayor tasa mundial de ejecuciones de sus ciudadanos".
El Departamento de Estado censura, además, en su informe "las restricciones impuestas a sus ciudadanos para poder cambiar de gobierno de manera pacífica a través de elecciones libres y justas". Y agrega la denuncia al "desprecio de las autoridades por la integridad física de los detenidos, torturados o muertos en forma arbitraria e ilegal".
Además, para seguir el análisis sobre la región, el informe hace referencia a la creciente brutalidad de grupos islamistas como el Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés) o el nigeriano Boko Haram.
Ambos han representado una de las tendencias más preocupantes para los derechos humanos en el mundo en 2014, según el documento sobre el tema.