Con la consigna #NiUna Menos, miles de personas se manifestaron en varias ciudades del país para reclamar contra los femicidios y la violencia de género hacia las mujeres. Organizaciones sociales, ONG, figuras del espectáculo, de la política y del mundo del deporte se sumaron a la iniciativa, que tuvo en el Congreso al punto de concentración en lo que se refiere a la Ciudad de Buenos Aires.
También participaron sobrevivientes y familiares de víctimas. Como cierre del acto porteño, la dibujante Maitena, el actor Juan Minujín y la actriz Erica Rivas leyeron un documento que sigue el espíritu del reclamo de cinco puntos que ya firmaron algunos políticos y funcionarios.
"Es un honor que me convoquen, Lo que podemos aportar es leer este documento y que se entienda hasta qué punto la cultura machista está metida en todos lados. Cuáles son los orígenes de los femicidios", aseguró Minujín.
Por su parte, Maitena remarcó que es un "tema a solucionar pronto" y que no le sorprendió la gran convocatoria de la marcha: "Me alegro mucho, la gente es quien puede cambiar las cosas. Basta de no hablar".
La actriz Florencia de la V también alzó su voz en este reclamo: "Vine porque es una causa buenísima y hay que apoyarla. Hay que decir basta. Es impresionante y me gusta. Mi sorpresa fue la cantidad de hombres que había. Es una convocatoria para todos. Veía en las caras la necesidad de aportar un cambio. Tiene que cambiar el pensamiento de los argentinos. Las mujeres trans también son parte de esto. Todos".
Desde Miami, la modelo Karina Jelinek junto a la abogada Ana Rosenfeld se sumaron a la iniciativa.
La actriz Moria Casán también adhirió, marchando junto a otros manifestantes y portando una bandera. Difundió las fotos en su cuenta de Twitter.
Referentes de todo el arco político se plegaron a la manifestación frente al Congreso. Allí estuvieron, entre otros, el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo (único presidenciable en la marcha); el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez; el ministro de Defensa, Agustín Rossi; la diputada del PRO Patricia Bullrich; el senador Fernando "Pino" Solanas; los diputados del bloque del Frente para la Victoria.
En cuanto al interior, los crímenes de Paulina Lebbos, Chiara Páez, Romina Ríos y Paola Acosta fueron algunos de los casos emblemáticos de femicidio que fueron recordados en las provincias. Las manifestaciones fueron multitudinarias, con más de diez cuadras de concentración en Mar del Plata, miles de personas en San Luis, Rosario y Córdoba, con la participación de familias, adolescentes con uniformes escolares, organizaciones civiles e incluso agrupaciones políticas y funcionarios de los gobiernos que eran objeto de los reclamos.
Entre los manifestantes hubo familiares de víctimas. Uno de ellos fue Jorge Taddei, el padre de Wanda, asesinada por el ex baterista de Callejeros Eduardo Vázquez. "Me siento orgulloso de ser argentino, esta convocatoria va a ser una bisagra para profundizar lo conseguido", consideró Taddei.
Gisela, hermana de Erica Soriano, quien está desaparecida desde el 21 de agosto de 2010, cuando estaba embarazada de dos meses y medio, dijo presente junto a su madre. "Vinimos para apoyar esta convocatoria y porque somos mujeres que tenemos hijas, sobrinas, primas que no queremos que les pase lo mismo que a mi hermana", señaló Gisela.
Cada 30 horas una mujer muere en el país víctima de la violencia de género
De acuerdo a las cifras proporcionadas por la ONG
, en 2014 se registraron 277 femicidios de mujeres y niñas. Desde 2008 hasta 2014, la cifra fue de
. En el 80% de los casos,
(esposo, novio o ex pareja).
Los cinco puntos del reclamo
Qué dice la ley
La Ley 26.485 fue sancionada en marzo de 2009 bajo el título: Ley de protección integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres en los ámbitos en que desarrollen sus relaciones interpersonales.
Según la ley, la violencia contra las mujeres está determinada por: "Toda conducta, acción u omisión, que de manera directa o indirecta, tanto en el ámbito público como en el privado, basada en una relación desigual de poder, afecte su vida, libertad, dignidad, integridad física, psicológica, sexual, económica o patrimonial, como así también su seguridad personal".
Sin embargo, la cifra de víctimas sigue en aumento.