Ha sido, sin duda, un golpe de efecto de alto impacto. La revista masculina Vangardist, que se edita en Austria, ha decidido imprimir su último número usando la sangre de tres personas que son HIV positivo. Su redactor jefe, Julian Wiehl, ha sido claro: la intención ha sido contrarrestar el estigma que a menudo va unido al virus responsable de causar el sida.
"Quisimos que la revista sea en sí misma una declaración contra los miedos irracionales que tiene el HIV y las peronas portadores de HIV", explicó.
"Tener la revista en tus manos es como sostener a alguien que es HIV positivo -agregó-. Nada puede suceder, nada puede dañarte".
Vangardist se publica por lo general sólo en formato digital, pero la editorial ha decidido sacar en papel una edición de 3.000 ejemplares que tituló "#HIVHeroes" . La sangre que se mezcló con la tinta fue donada por tres pacientes positivos.
Uno de ellos es Wiltrut Stefanek , de 45 años, diagnosticado como VIH positivo hace 20 años y que dirige un grupo que asiste en Viena a personas con sida y sus familias.
Vangardist viene envuelta en una bolsa de plástico, acompañada por la inscripción: "Rompe el sello y rompe el estigma". La editorial ha publicado además un video en el que muestra a los tres donantes y todos los controles y cuidados que se ha tenido para la manipulación de la sangre.
"Quiero que la gente entienda que las relaciones diarias con el HIV no suponen ningún riesgo", dijo Stefanek.
La revista ha sido publicada en alemán e inglés y se consige online por 50 euros (unos 54 dólares) Además de los 3.000 ejemplares impresos con sangre, hay otros 15.000 con tinta normal. El dinero recaudado será destinado a obras de caridad.
"Creemos que como revista de estilo de vida es nuestra responsabilidad dirigirnos hacia los problemas que afectan actualmente a la sociedad", explicó Wiehl.