El ex presidente de Uruguay José Mujica no descartó presentarse para otro mandato y se reconoció como un referente de su país, aunque eligió no adelantarse a los hechos: "Tengo 80 años, pensar en los 85 es bravo, ¿no?".
Así lo aseguró en una entrevista realizada por el diario español El País en ocasión de un viaje del ex mandatario a Buenos Aires para la presentación de un libro sobre su tiempo en el poder: Una oveja negra al poder, de Andrés Danza y Ernesto Tulbovitz.
"Cuando uno está con las armas en la mano, la política pasa por la mira. Es un problema que tenemos siempre los hombres armados"
El final de su mandato, sin embargo, no ha hecho que la influencia del uruguayo declinara, ni dentro ni fuera de su país. Consultado, "el Pepe" habló de la crisis venezolana, de la corrupción en Brasil, del proceso de paz con las FARC en Colombia y de los desafíos y las dificultades de la izquierda en la región.
Crítico, Mujica dio su propia definición de populismo: "(El problema es) cuando las medidas que se toman paralizan la economía, porque querés repartir tanto que al final quebrás el interés en el trabajo y la inversión. Si matás eso, no tenés para repartir", aseguró.
En la misma línea, habló de la situación venezolana: "Tiene la desgracia del petróleo", disparó. "¿Cómo va a andar una sociedad en la que cuesta más una botella de agua que un litro de nafta?".
Sobre la detención de opositores por parte del gobierno de Nicolás Maduro, Mujica prefirió una respuesta sinuosa y apuntó primero a la oposición, a la que acusó de utilizar la cárcel como una técnica contra el Gobierno, y después al oficialismo, al que acusó de "bobo" por entrar en la trampa opositora.
"Inducen al Gobierno a pasarse de la raya. Le crean una contradicción internacional notable y estos bobos entran. Se lo he dicho a ellos. Es un error", dijo Mujica a El País.
"Cuando el afán de hacer plata se mete adentro de la política, nos mata a la izquierda"
En otro momento de la entrevista, el ex guerrillero, que pasó 15 años de su vida en la cárcel, se refirió a la corrupción, a la que definió como un flagelo de carácter ético: "Cuando el afán de hacer plata se mete adentro de la política, nos mata a la izquierda". Y agregó: "Pasó en Italia, en parte en España. Es inexplicable lo de Brasil. Y (...) en Argentina el vicepresidente está procesado".
Sobre la situación de la izquierda, Mujica opinó: "Yo creo que estamos en un momento de retroceso de la izquierda en Europa y cierto grado de estancamiento en América Latina".
También se refirió al diálogo de paz que se desarrolla actualmente en Colombia entre el gobierno de Juan Manuel Santos y la guerrilla FARC, y se mostró optimista: "Nunca se ha estado tan cerca. Vale la pena intentarlo".
Además, se identificó con la guerrilla: "Cuando uno está con las armas en la mano, la política pasa por la mira. Es un problema que tenemos siempre los hombres armados. Tendemos a ver la estrategia política a través de las armas, desconfiamos de lo demás".