"Obviamente Irán tiene un papel aquí, dado su apoyo a los hutíes", dijo la vocera en funciones del Departamento de Estado, Marie Harf. "Y creo que sería de mucha ayuda en este momento que los iraníes respeten este nuevo embargo de armas impuesto por la ONU (...) y que dejen de respaldar a los hutíes", agregó.
Indicó que para Washington la resolución adoptada este martes por el Consejo de Seguridad era "importante", pues con ella las potencias exigían a los rebeldes retirarse de los territorios tomados en una extensa ofensiva que obligó al presidente yemení, Abd Rabo Mansur Hadi, quien cuenta con el respaldo de la ONU, a exiliarse.
La resolución "realmente muestra que el Consejo actuará rápidamente en este aspecto, lo que es bueno", señaló Harf, quien reiteró que Irán ha sido "increíblemente desestabilizador" en la región y que el objetivo es llevar a todas las partes de vuelta a la mesa de negociaciones sobre el futuro de Yemen.
Catorce de los quince miembros del Consejo votaron a favor, mientras que Rusia se abstuvo.
La resolución, presentada por Jordania y los países árabes del Golfo, pide "a todas las partes" en conflicto negociar en el menor tiempo posible un "rápido cese" de las hostilidades en Yemen.
Más temprano, Teherán propuso un plan de paz para Yemen que prevé un alto el fuego, al que seguirían negociaciones entre todas las partes, facilitadas por mediadores exteriores, declaró este martes el ministro iraní de Asuntos Exteriores, Mohamad Javad Zarif, en Madrid.
"He propuesto un alto el fuego, seguido de un diálogo que incluya a todas las partes y facilitado por terceros", declaró el canciller iraní, que propuso enviar ayuda humanitaria y proceder posteriormente a la constitución de un gobierno en el que participen todas las partes.
La proposición del jefe de la diplomacia iraní llegó poco antes de que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas adoptara la resolución que insta a los rebeldes chiítas hutíes a retirarse de los territorios conquistados y les impone sanciones, como un embargo de armas.
Yemen se encuentra sumida en los enfrentamientos entre los rebeldes chiítas hutíes, apoyados por Irán, y las fuerzas sunitas, respaldadas por una coalición árabe respaldada por Arabia Saudita.
Desde el 26 de marzo, esta coalición formada por nueve países árabes lleva a cabo ataques aéreos contra la rebelión en este país pobre e inestable de la península arábiga.
