Estados Unidos dijo el jueves que estaba preocupado por reportes de ataques contra manifestantes civiles en Panamá por la Cumbre de las Américas, después de que dos legisladores republicanos atribuyeron la violencia a seguidores del mandatario cubano, Raúl Castro.
De hecho, según publicó el blog Cuba al Descubierto, uno de los agresores fue el coronel Alexis Frutos Weeden, quien fue jefe de la inteligencia cubana en Venezuela entre 1999 y 2003 y le propinó una golpiza a Orlando Gutiérrez, líder del Directorio Democrático Cubano.
Los reportes de los ataques se producen en un momento incómodo para Washington que transita por un proceso para restablecer las relaciones diplomáticas con La Habana y que, según una fuente cercana a las negociaciones, se está preparando para sacar a la isla de la lista de países que apoyan al terrorismo.
"Estamos profundamente preocupados por los reportes de ataques contra representantes de la sociedad civil en Panamá por la Cumbre de las Américas", dijo la portavoz del Departamento de Estado, Marie Harf, en un comunicado en el que no indicó quién era responsable. "Condenamos a quienes usan la violencia contra los manifestantes pacíficos", agregó.
Los congresistas estadounidenses por Florida Ileana Ros-Lehtinen y Mario Díaz-Balart por Florida mencionaron el miércoles en comunicados los ataques en Ciudad de Panamá, los que atribuyen a partidarios de Fidel y Raúl Castro, que han gobernado Cuba desde hace más de 50 años.
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"Hoy, el régimen de Castro una vez más demostró que es la misma dictadura violenta y terrorista que siempre ha sido, ya que continúa exportando su marca de matonaje y agresión en cualquier sitio donde está la disidencia", dijo Díaz-Balart.
El Gobierno de Cuba no reconoce a la pequeña y fragmentada disidencia y la describe como "mercenarios" pagados por las potencias extranjeras, entre ellas Estados Unidos.
El primer vicepresidente cubano, Miguel Díaz-Canel, dijo el miércoles en La Habana que para Cuba "es inadmisible que estén presentes en Panamá representantes que para nada son legítimos de la sociedad civil nuestra".
"Son gente que cobra por anexar a su país. Y vamos a tener una posición firme y de rechazo", dijo Díaz-Canel, en alusión a los disidentes cubanos que se han dado cita en Panamá.
Durante la VII Cumbre de las Américas, que comienza el viernes en Panamá, se espera un histórico encuentro entre los presidentes de Estados Unidos y de Cuba, que por primera vez acude a una cita de esta naturaleza desde que comenzaron las reuniones en Miami en 1994.
Estados Unidos y Cuba sostuvieron negociaciones secretas durante 18 meses que derivaron en un acuerdo para retomar vínculos diplomáticos tras medio siglo de enfrentamientos.