Tras la noticia de que la jueza Fabiana Palmaghini rechazó el pedido de recusación de la querella y ratificó a la fiscal Viviana Fein al frente de la causa en la que se investiga la muerte de Alberto Nisman, la defensa de Diego Lagomarsino sembró dudas sobre las verdaderas motivaciones que tiene la estrategia de Sandra Arroyo Salgado, ex mujer del hombre que el 18 de enero apareció muerto con un disparo en la cabeza en el baño de su departamento.
El abogado Maximiliano Rusconi lanzó un golpe directo a la ex esposa del fiscal cuando fue consultado sobre si creía la versión de que, detrás de la pelea por dejar en claro que no se trata de un caso de suicidio sino de un homicidio, se esconde el interés por cobrar algún seguro de vida.
"Si hay un objetivo económico, no lo sé. Pero sí es cierto que la querella ha mostrado cierta preocupación patrimonial", señaló el defensor de Lagomarsino en diálogo con Luis Novaresio por radio La Red. "Hay una preocupación de Arroyo Salgado por bienes inmuebles y fondos de comercio de la madre y la abuela de Nisman", amplió.
El jurista argumentó que eso se desprende de los datos que la querellante incorporó a la investigación: "Eso es llamativo porque no tiene ninguna vinculación con el hecho. Es tan alocada esa introducción de información que no sé si es una reacción intempestiva o recoge los resabios de una estrategia".
En cuanto a la ratificación de la fiscal Viviana Fein al frente de la investigación, Rusconi consideró que fue una decisión acertada: "Hemos ganado todos con la decisión de Palmaghini, incluso Arroyo Salgado, si se entiende que lo que se busca es llegar a la verdad".
"Nosotros no hemos negado que (lo de Nisman) no sea un suicidio. Lo que decimos es: sigamos investigando. Lo seguro es que hoy en el expediente no hay elementos para excluir hipótesis. Entonces mantengamos todas abiertas y salgamos del concepto de muerte dudosa. Nos debemos una respuesta sólida sobre la verdad de los hechos", analizó el jurista.