Axel Kicillof agregó más leña al paro nacional de este martes. Tras haber dicho que el mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias está "muy bien", el lunes sostuvo que la medida de fuerza en realidad no es contra el tributo porque "afecta aproximadamente al 6% u 8% de los trabajadores argentinos". Si se toma sólo a los trabajadores registrados, esa cifra sube al 11 por ciento.
"Aún si dijéramos que no pagan el impuesto, seguirían con el paro", consideró el ministro de Economía, en la conferencia de prensa que compartió junto al jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, tras haberse reunido con las cámaras empresarias del transporte.
En el encuentro, los funcionarios les recordaron a los empresarios que el Estado pone en subsidios el equivalente al 70% de sus gastos y les reclamó una participación más activa en los intentos por levantar la medida de fuerza. Los hombres de negocios se comprometieron a intentar garantizar el servicio, pero reconocieron que no podrán hacer mucho si los trabajadores no se presentan a sus lugares de trabajo.
"No somos canallas para llamar a un empresario para intimarlo o apretarlo, como se dice vulgarmente, lo llamamos para que el estado no haga un papel que no quiere hacer más, que es el de Paganini", explicó Aníbal Fernández.
Kicillof recordó que el mínimo no imponible de Ganancias está fijado en $15.000 desde 2013. Esa cifra implica que, por ejemplo, "el 10% o 15% a lo sumo de los trabajadores de la UTA estén afectados". "Si el Gobierno tomara una medida con respecta al impuesto, afectaría a una parte muy chiquita de los que paran", argumentó.
Para concluir, el ministro de Economía señaló que, al analizar los números, encontraron que apenas una de cada diez personas que trabajan mañana están afectadas por Ganancias y volvió a insistir con que hay otra motivación detrás de la medida de fuerza. Pero cuando le preguntaron cuál era esa causa, eludió responder. "Las razones son de público conocimiento", indicó.