Una vez más, las acciones de Reino Unido sobre las Islas Malvinas logran parar al oficialismo y a la oposición en la misma vereda. El anuncio del secretario de Defensa, Michael Fallon, sobre el incremento del gasto militar en el archipiélago cosechó expresiones de reprobación en las principales fuerzas con representación en el Congreso.
El senador por Proyecto Sur, Fernando "Pino" Solanas, calificó como "bravuconada neocolonialista" a la medida de Londres, mientras que el diputado radical Julio Martínez lo describió como "otra provocación inadmisible e intolerable" no solo hacia la Argentina, sino también "un insulto para la inteligencia de la comunidad internacional".
Fallon defendió la resolución del gobierno de David Cameron al considerar que existe una "amenaza muy viva" de que exista un conflicto en la región. La prensa de ese país sugirió que la Argentina podría intentar recuperar las islas con ayuda de Rusia.
La sospecha del Reino Unido tampoco pareció viable a los ojos del titular del bloque de diputados del PRO, Federico Pinedo. "Los ingleses saben que los argentinos pusimos hasta en nuestra Constitución que la recuperación de Malvinas sólo puede hacerse conforme al derecho internacional, así que su militarización obedece a política interna o a intereses militares", observó.
El martes, el canciller Héctor Timerman sostuvo que el gobierno británico "utiliza" el tema de manera política. Al respecto, la jefa del GEN y precandidata presidencial Margarita Stolbizer señaló que "si quieren usar electoralmente el tema Malvinas y hacerles gastar dinero a los contribuyentes británicos, es una cuestión de ellos" y remarcó que la Argentina debe "fijar" una posición "independientemente de estas provocaciones de los británicos".
La diputada fustigó al Ejecutivo nacional al considerar que "cae una vez más en la sobreactuación y las bravuconadas para fijar posiciones en materia de política exterior", por lo que consideró que "son unos irresponsables y llevan a la Nación a los peores lugares en la consideración mundial".
También Solanas también cargó contra la política del gobierno nacional al señalar que "se han perdido más de dos décadas en políticas erróneas y entreguistas" mientras Gran Bretaña "avanza sobre nuestros recursos petroleros y pesqueros y que además, solidifica su presencia militar a escasos 500 kilómetros de nuestras costas".
En tanto, el diputado aliado al massismo Alberto Asseff (UNIR) presentó un pedido para que se cite a Timerman y al ministro de Defensa, Agustín Rossi, para que informen sobre la situación en Malvinas.
Por su parte, el senador kirchnerista Ruperto Godoy aseveró que "en lugar de seguir militarizando el área de las Islas Malvinas, correspondería que el Gobierno inglés se siente a la mesa de negociaciones, tal como establece Naciones Unidas, para notificarse que la Argentina no maneja ninguna hipótesis de conflicto en ningún lugar del mundo". Presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores y Culto de la Cámara alta, Godoy enfatizó que "el reclamo pacífico por la soberanía de Malvinas es una política de Estado que apoyan todas las fuerzas políticas y sociales de la Argentina".