Un museo brasileño recibió este jueves 139 obras de arte, entre ellas un Miró, decomisadas en el marco de la investigación de desvíos y corrupción en la estatal Petrobras.
Los cuadros incautados -obra de renombrados artistas, como el catalán Joan Miró o los brasileños Djanira y Heitor dos Prazeres- fueron entregados por la policía al Museo Oscar Niemeyer, ubicado en Curitiba.
Según informaron medios locales, la mayoría de las piezas estaba en la casa de Renato Duque, ex director del área de servicios de Petrobras que fue detenido el lunes en una nueva fase de la investigación.
Duque es señalado por integrar la trama de corrupción en la estatal petrolera, que se estima movió unos 4.000 millones de dólares en una década.
Las obras de arte "serán sometidas a un proceso de cuarentena -en el que son aisladas para evaluar su estado-, de higiene y limpieza" que podría durar hasta tres meses, dijo a la AFP un funcionario de prensa del museo.
"Probablemente" luego serán exhibidas al público, añadió, como parte de una misma colección.
Las 139 piezas que el museo recibió este jueves se suman a las 64 que el establecimiento ya tenía bajo su custodia, también provenientes de la operación Lava Jato, y entre las que se cuentan obras del español Salvador Dalí y el brasileño Vik Muniz.
La trama del llamado "Petrolao", develada hace un año, dejó al descubierto cómo las compañías sobornaban a directivos de Petrobras para poder manipular licitaciones y cobrar sobreprecios en las obras, generando un flujo de dinero negro que enriquecía a empresarios, directivos de la estatal y partidos políticos.
La magnitud del escándalo, que involucra a senadores, diputados y gobernadores en ejercicio, destapó una caja de Pandora que ha tenido un gran costo político para el Gobierno.
Lava Jato, la mayor investigación de corrupción y lavado de dinero en la historia de Brasil, desató el domingo protestas masivas y derrumbó al 13% la popularidad de la presidente Dilma Rousseff.