Música tenebrosa y figuras oscuras que avanzan hacia cámara como mensajeros de la muerte. Cámaras lentas, calidad HD, barridas digitales y un mensaje de clara propaganda yihadista. El último video de Boko Haram, grupo terrorista nigeriano que asola al centro de África, ya no es una suma de imágenes borrosas de baja calidad y audio confuso.
En una muestra evidente de los vínculos cada vez más estrechos entre Boko Haram y el Estado Islámico, la decapitación de dos supuestos espias cumple con todas las reglas de los videos estilo documental de los yihadistas que asolan a Siria e Irak.
De hecho, el material, de seis minutos de duración, ha sido subido a la página web que difunde los mensajes del Estado Islámico. En las imágenes, uno de los rehenes dice a cámara que recibieron pagos de las autoridades para espiar al grupo islamista, antes de que la grabación haga un corte en la escena para mostrar, poco después, los dos cuerpos decapitados.
Los yihadistas, que han matado a miles de personas y secuestraron a cientos en su campaña por instalar un Estado islámico en África, intensificaron sus ataques más allá de las fronteras de Nigeria en los últimos meses, llegando hasta Camerún, Chad y Níger.
El presidente nigeriano, Goodluck Jonathan, ya había dicho que Boko Haram está vinculado tanto a Al Qaeda como al Estado Islámico.
En el video, uno de los hombres dice que es oriundo de Baga en el estado de Borno, y el otro afirma que proviene de Michika, en el estado de Adamawa, ambas zonas que fueron recientemente recuperadas por el Ejército y que estuvieron en manos de los extremistas.