Pese a los controles, el Banco Central tuvo que vender casi u$s400 millones en el año

El cepo a importadores no evitó que el BCRA tuviera que desprenderse de dólares para abastecer a un mercado carente de billetes verdes. La liquidación de exportaciones cae un 20% en el año y suma presión al dólar oficial

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La política del Banco Central de mantener restricciones al dólar en el comienzo del año, lejos de haber sido efectiva, no alcanzó para que el saldo en el mercado de cambios sea beneficioso para Alejandro Vanoli. El Central lleva vendidos u$s385 millones en el mercado de cambios. Esto es, el saldo en lo que va de este año entre compras y ventas de la entidad (intervención) para regular la escasez de dólares.


En enero, el saldo fue negativo para el Central en 187 millones de dólares, según información oficial. Este febrero ya lleva un saldo también negativo de 210 millones. ¿Habría sido peor sin el cepo a importadores? Presumiblemente sí.


Pero lo concreto es que la política de regular el mercado, ante un escenario de clara escasez de divisas, no funcionó.


Según Econviews, la consultora de Miguel Kiguel, la "situación luce aún más complicada analizando los números de febrero". "Los únicos tres días del mes en que el Central logró cerrar con una posición compradora fueron los días en que restringió por completo la venta de divisas para el pago de importaciones", explicó.


"Esto evidenció por un lado la continuidad de los problemas de fondo que no permiten hacerse de divisas de manera genuina, y la decisión del Gobierno de defender las reservas internacionales aún a costa de afectar más la actividad económica", remarcó Kiguel.


Otro factor que ha venido influyendo -según Econviews- en este magro desempeño es la débil liquidación de divisas de exportaciones de oleaginosas y cereales. En lo que va del año, se liquidaron u$s1.813 millones, un 19,9% menos que en el mismo período 2014.


En febrero, el monto promedio diario liquidado se ubica un 40,9% por debajo de febrero 2014. "En este sentido, la caída en el precio de la soja respecto a los niveles en que se ubicaba un año atrás juega un papel importante. Por otro lado, la curva de futuros se ubica prácticamente en su totalidad levemente por encima de la curva de Lebacs, por lo que existen ciertos incentivos a retrasar las exportaciones", analizó la consultora.


A pesar de esta situación, el tipo de cambio continúa atrasándose cada vez más. Desde mayo del año pasado, la tasa promedio mensual de depreciación fue de 0,9%, bien por debajo del promedio mensual de inflación, provocando una apreciación real de la moneda.


"Esto se vio acentuado por la mayor depreciación nominal de los países emergentes en su conjunto y en especial de Brasil, el mayor socio comercial del país, lo que complica aún más el frente cambiario", asegura Econviews.



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