Al menos cuatro personas fallecieron este martes al caer un proyectil sobre un hospital de la ciudad ucraniana de Donetsk, la principal plaza fuerte prorrusa, según informó el Ministerio para Situaciones de Emergencia local.
"De acuerdo a nuestra información inicial, cuatro personas han muerto. Una de ellas estaba cerca del hospital, y las otras tres hacían fila para recibir asistencia humanitaria que se estaba distribuyendo frente al edificio", dijo Alexéi Kostrubitski, jefe de Emergencias en Donetsk.
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Sin embargo, según otras fuentes en realidad serían 15 los muertos en el bombardeo contra el hospital y los edificios adyacentes.
Entre las personas que perdieron su vida figurarían tanto transeúntes como personal del hospital, cuyo edificio está ahora en llamas, en un incendio que intentan sofocar los bomberos.
"Un obús cayó en el hospital Número 27. Hay muertos y heridos", señala un comunicado oficial del Ayuntamiento local.
El ataque con fuego de artillería, que se produjo al mediodía hora local, afectó a varios edificios ubicados en las inmediaciones e inutilizó una línea de alto voltaje, por lo que todo el barrio se ha quedado sin energía eléctrica.
Según las primeras imágenes difundidas, la entrada y parte de la fachada del edificio ha resultado severamente dañada.
Los separatistas prorrusos acusaron de inmediato a las fuerzas ucranianas del bombardeo del hospital, para lo cual habrían utilizado una lanzadera de misiles Uragán.
El hospital se encuentra en el populoso barrio de Tekstílshik, que está en el sudoeste de la ciudad y donde viven unas 300.000 personas.
Los rebeldes instaron a la misión de la
a
lo sucedido, para
provino el ataque de artillería.