Varios países miembros de la coalición antiyihadista, que se reunieron la semana pasada, se han comprometido a enviar a cerca de 1.500 soldados para entrenar y ayudar a las fuerzas iraquíes en su lucha contra los yihadistas del grupo Estado Islámico.
Dichos soldados se sumarán a los asesores militares estadounidenses ya desplegados en Irak, indicó este alto mando militar de la coalición desde Kuwait. El general no precisó qué países de la alianza liderada por Estados Unidos facilitarán ese personal. Según él todavía se están negociando los detalles.
"Estamos trabajándolo todavía. Quiero dejarles tiempo para que vuelvan a sus capitales y trabajen en los detalles", añadió el general, tras la reunión celebrada los días 2 y 3 de diciembre. No obstante, adelantó que la mayoría de los soldados enviados se dedicarán a entrenar a las tropas iraquíes.
Actualmente ya hay unos 1.500 militares norteamericanos en Irak, para proteger la embajada y asesorar al Ejército iraquí y a las fuerzas kurdas. El presidente estadounidense, Barack Obama, ha aprobado además el envío de otros 1.600 para entrenar y asesorar a las fuerzas iraquíes.
"Mucho camino por recorrer"
En el terreno, la coalición llevó a cabo, estos últimos tres días, 15 bombardeos en Siria, 14 de ellos en el sector de Kobane. Esta ciudad kurdo siria, próxima a la frontera con Turquía, se convirtió en símbolo de la resistencia al ISIS.
En Irak, la coalición informó del lanzamiento de 31 ataques aéreos en 72 horas contra posiciones de los yihadistas cerca de Kirkuk, Sinjar y Mosul. Con más de 1.200 bombardeos en Irak y en Siria desde el inicio de las operaciones militares, los yihadistas "empiezan a notar la presión", aseguró Terry.
El ISIS está "a la defensiva, tratando de mantener los territorios que ha ganado y todavía con capacidad de lanzar algunos ataques de alcance limitado", precisó. El apoyo de la coalición "permitió a las fuerzas de seguridad iraquíes recuperar terreno", declaró por su parte el saliente secretario de Defensa norteamericano, Chuck Hagel, durante una visita a una base americana en Kuwait.
Para Terry, las fuerzas iraquíes "aún tienen mucho camino por recorrer", pero "mejoran cada día".
El inicio el 9 de junio de la ofensiva yihadista en el norte de Irak estuvo marcada por la desbandada del Ejército iraquí, si bien las Fuerzas Armadas se recompusieron poco a poco antes de empezar a registrar algunos importantes éxitos.
Desde el 8 de agosto, las fuerzas iraquíes están apoyadas por la aviación estadounidense, a la que se unieron posteriormente varios países occidentales. Por su parte, los bombardeos en Siria, en los que participan también Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Jordania y Bahréin, comenzaron el 23 de septiembre.