Ser una potencia mundial implica superioridad económica, productiva, geopolítica, pero también militar. Pese a estar en un mundo de creciente interdependencia, es claro que el poderío de los ejércitos sigue siendo un factor determinante en el orden mundial.
Por ello, el 41% del presupuesto militar global lo tiene los Estados Unidos, cuyo presupuesto en esta área es de u$s711.000.000.000. Y no es casualidad que le siga China. El crecimiento del gigante asiático parece no detenerse y su gasto en defensa (u$s114.300.000.000) representa el 8,2% del total mundial.
Tercero en la lista figura Rusia (4,1%), y le siguen el Reino Unido (3,6%) y Francia (3,6%).
Brasil es el único latinoamericano entre los primeros 10: su gasto militar representa el 2%, lo mismo que el de Italia.
Los países con mayor porcentaje de gasto militar del total mundial:
1) Estados Unidos (41% del gasto militar total mundial)
2) China (8,2%)
3) Rusia (4,1%)
4) Reino Unido (3,6%)
5) Francia (3,6%)
6) Japón (3.4%)
7) Arabia Saudita (2,8%)
8) India (2,7%)
9) Alemania (2,7%)
10) Brasil (2%)
11) Italia (2%)
Cómo se obtienen los datos
Los datos sobre gastos militares se obtienen de la definición de la OTAN, la cual incluye todos los gastos corrientes y de capital relativos a las fuerzas armadas, incluidas las fuerzas de mantenimiento de la paz; los ministerios de defensa y demás organismos de Gobierno que participan en proyectos de defensa; las fuerzas paramilitares, si se considera que están entrenadas y equipadas para operaciones militares; y las actividades en el área militar.
Dichos gastos incluyen el personal militar y civil, incluidas las pensiones de retiro del personal militar y servicios sociales para el personal, operación y mantenimiento, compras, investigación y desarrollo militares, y ayuda militar (en los gastos militares del país donante). No incluye la defensa civil y los gastos corrientes de actividades militares previas, como los beneficios para veteranos, desmovilización, conversión y destrucción de armas.
Sin embargo, esta definición no puede aplicarse a todos los países, ya que eso requeriría mucha más información detallada que la disponible en los presupuestos militares y las partidas de gasto militar fuera del presupuesto.