El primer contacto de Tansy Aspinall, una joven británica de 25 años, con un simio fue con apenas 18 meses de edad, cuando fue fotografiada dentro de una jaula con un gorila de 136 kilos.
Tansy es hija del conservacionista Damian Aspinall, un millonario que hizo su fortuna a partir de sus casinos en Mayfair, quien le inculcó el amor por los animales salvajes. Incluso Damian gastó parte de su dinero en la creación de casas de campo para este tipo de animales.
Así es como su hija creció al lado de ellos en el Howlett Wild Animal Park, en Kent, también propiedad de su padre. Allí forjó una especial relación con Djalta y Bims, dos gorilas a quienes había visto por última vez doce años atrás, cuando fueron devueltos a su hábitat natural en 2002.
Meses atrás, Tansy, que hoy es diseñadora de joyas, realizó un viaje a la gran reserva natural del país africano de Gabón que ejecuta la fundación de su padre.
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Bajo el espeso calor tropical, y después de varias horas de buscar a unos amigos, la joven y su padre se encontraron sorpresivamente con dos viejos amigos: Djalta y Bims.
Tras su emotivo encuentro, sostuvieron que los gorilas se encontraban "felices, saludables y tranquilos", según consigna Daily Mail.
Como prueba de este enternecedor momento, Tansy se fotografío junto a "sus viejos amigos".