La importante demanda de los departamentos de dos ambientes, la "estrella" del mercado inmobiliario, llevó a que en este año los alquileres se incrementen 25,25% en este segmento. Es un porcentaje mayor al que se vio en las viviendas de tres ambientes, que sólo subieron en promedio un 19 por ciento.
La variación de los incrementos consolidó la tendencia hacia la reducción en la brecha de precios de ambos tipos de inmuebles. En agosto de 2009, la diferencia era del 37%, pero se fue acotando hasta alcanzar hoy el 13 por ciento.
"Seguramente se deba este comportamiento en los precios de alquileres a la presión que ejerce la demanda sobre las propiedades volcadas al mercado de menor valor", planteó el informe confeccionado por Reporte Inmobiliario.
El estudio calculó que el valor promedio de la Ciudad de Buenos Aires para departamentos de 2 ambientes se ubica actualmente en $2.900 mensuales, mientras que las unidades de 3 ambientes muestran un promedio de $3.271 por mes en este último trimestre. Hacía cinco años, los precios se ubicaban en torno a $1.152 y $1.580 respectivamente.
El barrio con los alquileres más caros para un dos ambientes es Recoleta, con un valor promedio de $3.255. La diferencia en esa zona con los de tres ambientes promedian los $4.230, es decir un 30%, lo que la posiciona como una de las más altas de la Ciudad. Pero en otros barrios, como Liniers, Agronomía, Villa Crespo o Parque Patricios, la variación puede ser de apenas unos $300 mensuales, siempre considerando las diferencias entre ubicación y calidad de la propiedad, publicó hoy el diario Clarín.
El dato positivo es que el incremento del 25% interanual en los alquileres se ubica muy por debajo de las estimaciones de inflación de este año, que consultoras privadas calculan ente el 35 y el 40 por ciento.
La escasa variación en el precio de este concepto se debe a que una puede pagar no más del 25% a 30% de sus ingresos por su vivienda. A ello hay que sumarle el aumento de las expensas, que se encarecerán este año más del 30%, y los servicios, entre otros gastos vinculados a la residencia.