De acuerdo con un estudio reciente, el 78% de los teléfonos móviles vendidos en el país durante la primera mitad del año fueron smartphones. El segmento se benefició especialmente con la aparición de equipos con precios más económicos que ampliaron el alcance del rubro.
Sin embargo, la expansión de los teléfonos inteligentes –y de los teléfonos móviles en general– en el país tiene una contracara desagradable. De acuerdo con cifras de la Cámara de Agentes de Telecomunicaciones Móviles de la Argentina (Catema), en el país se roban 6.000 celulares por día.
El 60% de esos robos corresponde a asaltos a locales comerciales, según consigna hoy el diario La Nación. En esta modalidad, los delincuentes llegan al comercio equipados con mochilas o bolsos y cargan tantos dispositivos como puedan.
Ni siquiera abren las cajas registradoras para hacerse con la recaudación, ya que su interés está en los equipos: se llevan hasta las réplicas de los teléfonos que se utilizan como muestra y que no sirven para hacer llamadas. En 10 minutos, se van del local con su botín y, entre dos y tres horas más tarde, venden los móviles en el mercado negro.
Los modelos más buscados por los delincuentes son todos de alta gama, con precios no inferiores a los $8.000: el Samsung Galaxy S5, el Nokia Lumia 1020, el Sony Xperia Z1 y el BlackBerry 10.
Las pérdidas que sufren los comercios, cuando los delincuentes se llevan alrededor de 50 dispositivos parten de entre $100.000 y $150.000. Por ese motivo, los dueños de los locales han empezado a utilizar nuevas alternativas, como la venta a pedido en caso de teléfonos costosos.
El presidente de Catema, Hugo Rolón, señaló en lo que va del año hubo "un fuerte aumento de robos a mano armada en los locales de venta de celulares". Añadió que cada semana los delincuentes asaltan entre cinco y seis comercios.
El directivo consideró que "el negocio que deriva del robo de celulares" ronda los 30 millones de pesos por mes, a la vez que fuentes del sector confirmaron que la cifra va en aumento, principalmente por la existencia de un mercado paralelo de desbloqueo y liberación de dispositivos.
Algunos comerciantes, con el apoyo de Catema, que han sufrido varios robos buscan impulsar ante la Comisión Nacional de Comunicaciones la creación de una "lista blanca" de códigos de identificación de equipos de modo que únicamente esos teléfonos (y los que la entidad apruebe) estén aptos para el uso. Así, si un delincuente intenta cambiar la identificación para revender el teléfono, este no funcionaría.
El robo de celulares en América Latina
Según una encuesta de la empresa de seguridad informática ESET, el 58% de los usuarios latinoamericanos de teléfonos móviles sufrió un robo de equipo en 2013. Las principales víctimas fueron mujeres y adolescentes.
En este sentido, Guatemala en la actualidad discutirá una ley que prevé hasta 15 años de cárcel y multas de más de u$s25.000 por el robo de celulares y su venta ilegal.
El negocio de robo y reventa de celulares mueve alrededor de u$s12 millones en todo el mundo. Para la firma de ciberseguridad es necesario que gobiernos, empresas y usuarios alcancen acuerdos para combatirlo.