Marco Aurélio Garcia
, uno de los principales asesores de la presidente brasileña Dilma Rousseff, hombre del PT y amigo personal de Lula da Silva, reveló que empresarios locales, incluyendo banqueros, entablaron conversaciones con los fondos especulativos que ganaron la batalla judicial en Nueva York,
sin garantías de que luego puedan negociar, según sus expectativas, con la Argentina.