Desde que Apple lanzó el nuevo iPhone 6 el viernes, ha vendido más de 10 millones de unidades. Según reveló un estudio, construir el dispositivo, cuyo modelo más básico de 16 gigabytes tiene un precio de mercado de u$s650, cuesta tan solo u$s200, lo que le da un margen de beneficios a la empresa del 69 por ciento.
Para realizar esta investigación, publicada en Re/Code, especialistas de la firma IHS analizaron los distintos componentes usados en cada modelo, y determinaron que el valor de la producción del iPhone 6 sería de entre u$s200 y u$s247, mientras que el del Plus, que se vende por al menos u$s750, sería de entre u$s216 y u$s263.
Entre las distintas piezas, las más costosas son la pantalla y el sistema táctil, cuyo costo combinado de fabricación es de u$s45 para el modelo estándar y u$s52,50 para el Plus. Por otra parte, el valor del trabajo asociado con el ensamblado es sumamente inferior: tan sólo entre u$s4 y u$s4,50 por cada aparato producido.
Naturalmente, el informe no toma en cuenta las inversiones en marketing, publicidad y distribución, ni el dinero gastado por la empresa para la investigación y el desarrollo del dispositivo.
Aunque un margen de beneficios de 69% es ciertamente alto, palidece en comparación con los auriculares Beats de Apple: con un valor de producción de entre u$s14 y u$s40 y un precio de venta de u$s300, el margen es de entre 87 y 95 por ciento.