En sus 94 años de existencia, ninguna mujer ha conducido la NFL, pero Condoleezza Rice parece decidida a convertirse en la nueva dueña del deporte más popular de los Estados Unidos. La ex secretaria de Estado aparece con una imagen de seriedad, aplomo y habilidad política para corregir una imagen dañada y salpicada por diferentes escándalos.
La difusión del video de la estrella de los Ravens de Baltimore Ray Rice golpeando a su esposa Janay dañó los intereses de la liga. Y la ex secretaria de Estado de George W. Bush (2005-2009) es la señalada para cambiar el rumbo.
Condoleezza ya logró romper una de las barreras más inexpugnables de los Estados Unidos en el deporte tras ser aceptada como miembro del Augusta National de golf, en 2012.
"Sería muy interesante, porque creo que el fútbol, ??con el debido respeto al béisbol, es una especie de pasatiempo nacional que une a las personas. Se trata de una importante institución estadounidense", opinó en 2002 tras ser consultada sobre la importancia de participar en la NFL.
Zalmay Khalizad, embajador de Estados Unidos ante las Naciones Unidas en el mandato de Bush, recuerda cómo Rice intentaba cautivar a los líderes mundiales con poco interés en la NFL con su conocimiento enciclopédico del juego.
Los medios estadounidenses creen que su conducción volvería a despertar el interés y respeto por el deporte entre las mujeres horrorizadas tras las imágenes de Ray Rice, despedido la semana pasada por los Cuervos de Baltimore. O por ejemplo, el caso de Ray McDonald, ala defensiva de los 49ers de San Francisco, arrestado por golpear a su novia embarazada.
The Washington Post señala que "Roger Goodell ha hecho un lío de ella" y exige la intervención de la primera mujer en el deporte: "Condoleezza Rice necesita un tiempo por su intenso amor al juego y para salvar la NFL".