El segundo paro nacional de 2014, encabezado por los sindicatos opositores, volvió a mostrar calles vacías, falta de transporte público y piquetes en algunos accesos a la ciudad. Según el líder de la CGT opositora, Hugo Moyano, el "acatamiento fue de un 80 por ciento", mientras que el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, minimizó desde temprano el impacto y dijo que el 75% de los trabajadores manifestó su voluntad de trabajar.
Pero más allá de los cruces entre sindicalistas y funcionarios, la huelga impactó en la economía con un costo estimado en u$s1.143 millones, según un informe de la consultora Orlando Ferreres & Asociados, al que accedió Infobae. El cálculo se realizó en términos de Valor Bruto Producido (VBP) en la jornada, "que sería equivalente a ponerlo en términos de venta o facturación". Así, la huelga redujo en 37% el Valor Bruto producido en la jornada de hoy.
El costo económico de este paro resultó menor que el del 10 de abril, que incidió con pérdidas por u$s1.723 millones si se toma en cuenta el mismo cálculo. El VBP diario de agosto es de u$s3.190 millones medido al tipo de cambio oficial, y en este sentido, se estimó la adhesión al paro y el impacto indirecto que tuvo en cada sector de la economía.
El informe se refiere específicamente al impacto "indirecto" que tiene la huelga en la baja de ventas, y explica que son aquellos sectores que no están vinculados directamente entre sí por la cadena de producción. "Un ejemplo de esto serían los restaurantes y confiterías que se encuentran cerca de Tribunales", especificó, ya que los judiciales que responden a Julio Piumato se sumaron a la protesta.
Los sectores productores de bienes perdieron u$s687 millones, y redujo en un 46% la venta o la facturación del día. Mientras que la industria manufacturera tuvo una caída mayor al 60% en el valor bruto producido en este 28 de agosto, la agricultura, la ganadería y la pesca terminaron la jornada de paro nacional sin pérdidas, así como el sector de electricidad, gas y agua.
Por su parte, la economía perdió u$s456 millones por el sector productor de servicios. Dentro de este rubro, los comercios mayoristas y minoristas son los que perdieron más plata: su facturación cayó un 70%, contra una caída del 55% en la huelga del 10 de abril, según datos de la consultora.
Cada sector se ajusta también en términos de si las pérdidas son o no recuperables luego de esa jornada. Por ejemplo, un restaurante o kiosco no podrá recobrar nada de lo que no se haya vendido este jueves: lo que no se vendió hoy no se venderá mañana. En cambio, el sector agropecuario no recibe impacto económico porque la recuperación es "cercana al 100 por ciento".
Pero también hay sectores que se encuentran en la escala de grises. La construcción y la industria tendrán una "recuperación parcial", mientras que el valor de recupero en los servicios suele ser más alto. A contramano, las pérdidas económicas en educación no se recuperan. Por el rubro enseñanza, servicios sociales y de salud se perdieron u$s114 millones. Y la Administración Pública y Defensa tuvo una pérdida de u$s72 millones, lo que equivale a una caída en el 36% del valor bruto producido diario.