Crece la tensión en Ucrania: los rusos invaden una ciudad fronteriza

El rápido deterioro del panorama en la región oriental de Ucrania obligó al Gobierno de ese país a pedirle este jueves ayuda militar de "gran envergadura ante la invasión rusa no disimulada" a la Unión Europea, según afirmó el embajador ucraniano ante el bloque regional, Konstiantyn Eliseyev.

"Pedimos una sesión extraordinaria del Consejo Europeo el 30 de agosto sobre Ucrania (...) Basta de connivencia y de apaciguamiento del agresor. La solidaridad debe materializarse con sanciones significativas y con una ayuda militar y técnica de envergadura", declaró Eliseyev, según la página de Facebook de la sede diplomática ucraniana ante la UE.

En este sentido, separatistas respaldados por soldados rusos ingresaron en la ciudad de Novoazovsk, en el sudeste de Ucrania, dijo el jueves un combatiente a favor del Gobierno. "Hay equipo militar en Novoazovsk que llegó hace dos días a través de la frontera desde Rusia", dijo el combatiente, del denominado batallón Azov que apoya al ejército ucraniano.

"El equipo lleva banderas de rebeldes de la RPD (República Popular de Donetsk), pero hay fuerzas regulares rusas", dijo el combatiente, que no quiso ser identificado.

Los separatistas han tomado el estratégico punto alto de Savur-Mohyla en el este de Ucrania, desde donde se divisan amplias zonas de la región, dijo una fuente militar el jueves.

Un responsable militar de la OTAN, quien calificó el panorama como "muy preocupante", aseguró que más de 1.000 soldados rusos combaten actualmente en territorio ucraniano y sobre todo en la zona de Novoazovsk.

"Bastante más de 1.000 soldados rusos combaten actualmente en Ucrania. Apoyan a los separatistas, luchan con ellos" contra las fuerzas armadas ucranianas, afirmó, aclarando que se basaba en "una estimación muy prudencial".

Por este motivo, el presidente ucraniano, Petro Poroshenko, dijo el jueves que las fuerzas rusas habían invadido su país y pidió una reunión urgente del consejo de seguridad y defensa ucraniano para decidir las próximas medidas que adoptará en la crisis.

"Tomé la decisión de cancelar una visita de trabajo a la República de Turquía en relación con el rápido deterioro de la situación en la región de Donetsk, en particular en Amvrosiyivka y Starobesheve, debido a que ha tenido lugar una invasión de las fuerzas rusas", dijo Poroshenko a través de un comunicado en el sitio web oficial de la Presidencia.

Este nuevo avance ruso sobre el este de Ucrania se produjo apenas 48 horas después de la reunión que Poroshenko mantuvo el martes pasado con su colega Vladimir Putin durante una cumbre de jefes de Estado en Minsk, capital de Bielorrusia.

Tras el encuentro, el mandatario ucraniano aseguró que Rusia también avaló su plan de paz: "La estrategia de paz que quiere desarrollar Ucrania fue apoyada por todos los dirigentes que participaron en la cumbre de Minsk, sin excepciones", indicó Poroshenko.

Doble pedido a Rusia

La Unión Europea le pidió este jueves a Rusia el "fin inmediato" de las hostilidades en la frontera ucraniana. "Estamos extremadamente preocupados por los últimos acontecimientos, y por eso repetimos nuestro llamamiento a Rusia para que ponga fin inmediato a cualquier hostilidad en la frontera, y esto obviamente incluye el flujo de armas, equipos y personal militar de Rusia hacia Ucrania", afirmó en la rueda de prensa diaria de la Comisión Europea (CE) la vocera comunitaria de Exteriores, Maja Kocijancic.

Kocijancic reiteró el apoyo de la UE a una "solución política" a la crisis ucraniana, que debe basarse en el "respeto completo a la soberanía de Ucrania y su integridad territorial".

Además, la responsable de prensa recordó que la crisis ucraniana será abordada en los próximos días por los cancilleres de los países que componen la UE. Estos mantendrán un encuentro informal el viernes y el sábado en Milán, al igual que los líderes europeos que realizarán una cumbre el sábado y en cuya agenda figura Ucrania.

A su vez, Lituania acusó este jueves a Rusia de llevar a cabo una "evidente invasión militar" en Ucrania, y solicitó una reunión del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas sobre esta cuestión.

"Lituania condena firmemente la evidente invasión del territorio de Ucrania por el ejército de la Federación Rusa, y solicita al Consejo de Seguridad de la ONU que esta cuestión sea examinada lo más rápido posible", declaró el ministro lituano de Asuntos Exteriores.

Según el país báltico, miembro no permanente del Consejo de Seguridad, las acciones de Moscú "violan abiertamente la soberanía y la integridad territorial de Ucrania y socavan la seguridad en toda la región".

La reacción de la ONU fue convocar a una sesión de urgencia del Consejo, que se pautó para este jueves a las 13:00 GMT.

Postura del Kremlin

La administración de Vladimir Putin anunció que Rusia amenazará la seguridad de Occidente si la OTAN refuerza la presencia en sus fronteras.

"Cualquier intento de la OTAN de proyectar fuerza contra Moscú y reforzar su presencia militar en los países fronterizos con Rusia tendrá respuesta y será contraproducente para la seguridad en Europa", advirtió el embajador ruso ante la Alianza Atlántica, Alexandr Grushkó.

Durante una entrevista concedida a la agencia Interfax en vísperas de la cumbre que celebrará la Alianza en Gales los próximos 4 y 5 de septiembre, el diplomático agregó: "Una acción de este tipo "debilitará la seguridad de la propia OTAN y de los países que tomen parte en esos intentos. Los intereses de la seguridad común paneuropea sufrirán seriamente".

Ante la insistencia de países como

sobre la amenaza rusa para su seguridad y sus reiteradas solicitudes para que la OTAN incremente su presencia en el este de Europa, Grushkó recordó que "estas ideas, que contradicen los acuerdos base entre Rusia y la Alianza, no añadirán estabilidad a las relaciones" entre Moscú y la organización que lidera