La Organización para la Defensa de la Salud, la Fundación Vivo Sano y la Fundación para la Salud Geoambiental lanzaron en España una campaña nacional para retirar el wi-fi de los colegios, alertando sobre sus riesgos.
Entre tanto, Inglaterra, Francia y Suecia son algunos países en los que se está retirando y reemplazándolo por el cable ya que la tecnología inalámbrica no está revisada y ningún organismo puede decir qué potencia emite y cómo se controla.
Ante esto, los expertos señalan que hay estudios que relacionan la hiperactividad, las cefaleas y el mal dormir infantil con estas ondas y donde se vincula la exposición prolongada a radiaciones electromagnéticas con ciertos tumores, según informa el diario Clarín.
La Organización Mundial de la Salud por su parte, clasificó oficialmente este tipo de radiaciones como posible cancerígeno.