La estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) está considerando importar crudo argelino para diluir sus propios crudos extrapesados. "El departamento de comercio de PDVSA evalúa la estrategia de importar crudo Saharan Blend de Argelia", dice el documento, según difundió la agencia Reuters.
La medida marcaría la primera importación de esta materia prima en la historia del país hecha de forma regular, dado que en el pasado, durante huelgas de refinerías o accidentes, como la explosión de la planta Amuay en 2012, el gobierno chavista tomó la decisión de importar combustible temporalmente.
Asimismo, varios de los componentes de la gasolina que se consume en Venezuela son importados. En los últimos años, PDVSA ha comprando un volumen cada vez mayor de productos refinados, como nafta pesada, para mezclar con su producción de crudo extrapesado de la Faja Petrolífera Hugo Chávez, en el Orinoco, la mayor región productora.
Estas operaciones son necesarias para convertir el crudo extrapesado en un producto exportable, pero se producen en medio de la declinación de la producción local de crudos medianos y livianos que antes se usaban como diluyentes, provocada por la asfixiante crisis económica.
Como el precio de la nafta ha aumentado, esto afecta el flujo de caja de la petrolera estatal, que ya de por sí enfrenta pérdidas debido al valor irrisorio al que se vende el combustible (cada litro cuesta 0,07 bolívares, menos de 2 centavos de dólar).
El petróleo es la principal fuente de ingresos para el gobierno de Nicolás Maduro, que pese a los bajos precios internos, se ve beneficiado por el alza que se registra en los mercados internacionales. El año pasado Venezuela vendió un promedio de 2,43 millones de barriles por día de crudo y derivados, según cifras de PDVSA.