Los bomberos informaron que pudieron hallar los restos de las siete personas que viajaban en la avioneta, pero aclararon que por la desintegración -producto de la explosión- la identificación de cada uno dependerá de exámenes de ADN, que ya han comenzado a realizarse en el Instituto Médico Legal de San Pablo. En total, tomará entre dos y tres días, según precisó el comisario Aldo Galleano, a cargo de la investigación.
La aeronave en la que se trasladaban el candidato presidencial Eduardo Campos, sus asesores y un camarógrafo se estrelló el miércoles en una zona residencial de la ciudad de Santos. El accidente ocurrió en medio de un fuerte temporal, y por el impacto el aparato quedó totalmente destruido y diseminado un radio de unos 200 metros.
La noticia conmocionó a todo Brasil, que celebrará las elecciones dentro de dos meses. Campos estaba tercero en las encuestas, con una intención de voto del 10 por ciento. Su muerte deja huérfano al Partido Socialista (PSB) y a la alianza que formaba con Red de Sustentabilidad, cuyos miembros tienen tiempo hasta el sábado 23 de agosto para definir si presentarán a otro candidato o si se retirarán de la contienda electoral.
Tanto la prensa como todos los analistas políticos coinciden en que los socialistas postularán a la ecologista Marina Silva, quien era compañera de fórmula de Campos como candidata a la vicepresidencia. Silva, además, tuvo una buena performance en las elecciones de 2010, con 19,3% de los votos.
El fallecimiento de Campos ha llevado al resto de los postulantes presidenciales a suspender sus campañas. Entre quienes han dejado en suspenso sus actividades de campaña, están la presidente Dilma Rousseff, que aspira a la reelección, y su principal rival, el socialdemócrata Aécio Neves. Ambos se manifestaron consternados por la trágica muerte del candidato socialista.