En el evento que se realizó anoche en el bar La Trastienda, del barrio porteño de San Telmo con la excusa de poner en funciones al nuevo subsecretario de la Juventud bonaerense, su ahijado Domingo Angellini, el gobernador ratificó su "lealtad a la presidente Cristina Kirchner y al peronismo". Allí, llamó a "tener cuidado y estar atentos" ante "quienes proponen soluciones y quieren cambiar todo", en alusión a sus rivales de la oposición.
"A esta juventud de la Ola Naranja, que venimos compartiendo encuentros en distintas provincias, quiero agradecerles el apoyo, porque es la fuerza de la juventud" la que lleva a "ofrecer mi candidatura por la gran Argentina", afirmó Scioli al iniciar un discurso de 22 minutos en el que se mostró rodeado de cientos de jóvenes con carteles con la leyenda "Scioli 2015", banderas y gorritas de color naranja.
Scioli salió al escenario acompañado por su esposa, Karina Rabolini; el jefe de Gabinete bonaerense, Alberto Pérez; el secretario de Deportes, Alejandro Rodríguez; el presidente de la Fundación DAR José "Pepe" Scioli y el secretario de Derechos Humanos provincial, Remo Carlotto, además de un grupo de referentes de la "Ola Naranja", el logo que marcará con un sol en el medio, la carrera presidencial del gobernador.
Durante el acto, Scioli también puso en funciones a la dirigente Pilar Alvarez -una joven universitaria de La Plata y ex jefa de prensa del Ministerio de Gobierno- al frente de la administración de la Lotería Provincial, tras poner como ejemplo a varios de sus funcionarios por "el esfuerzo y la tenacidad".
El acto comenzó en medio de canciones de rock de bandas como Catupecu Machu, Los Redonditos de Ricota o Los Piojos y terminó entre una lluvia de papelitos en el escenario por donde suelen pasar bandas musicales, al ritmo de una cumbia cuyo estribillo repetía: "Si, si, se viene, si si, se siente, la Argentina con Scioli presidente, unida y floreciente..." y otro que rezaba: "Scioli corazón, son un gran trabajador, Daniel estoy con vos, con Evita y con Perón".
Afuera, un micro pintado de naranja y la palabra "Presidente", escoltaba a otros cientos de jóvenes que quedaron afuera tocando bombos y cantando la marcha de la juventud peronista.
En ese contexto, como primer orador -cerró el acto el "Mingo" Angellini- Scioli llamó a "cuidar los logros para alcanzar la soberanía y el desarrollo" que dijo "son las banderas del peronismo".
Tras elogiar la "política de Derechos Humanos que puso en marcha ese gran líder que fue Néstor Kirchner" al hacer mención de la recuperación reciente del nieto de Estela de Carlotto, Scioli destacó "la lucha que está dando la Presidenta (Cristina Fernández) para dejar un país desendeudado".
"Eso es honrar las banderas del peronismo y la soberanía. El desarrollo es el nuevo nombre de la justicia social", arremetió.
No obstante, admitió que como gobierno "hay que reconocer siempre las dificultades" en referencia a la situación del país, y en ese marco, ratificó su intención de postularse a la Casa Rosada: "Si Dios quiere y me dan la posibilidad de ser Presidente de la Nación", afirmó.
El gobernador prometió "atraer inversiones para generar más puestos de trabajo" y llamó a "humanizar más la política".
"Cómo fallar la confianza que te han dado la Presidente, el peronismo, soy un hombre leal, no hay que dejarse llevar por la coyuntura", insistió.