"Argentina puede disentir con la Corte, pero las tergiversaciones de los hechos tienen que parar", urgió. Pero ante todo, Griesa dejó en claro en los primeros momentos de la audiencia pública que aunque la Argentina entró en default, aún debe cumplir con las obligaciones del fallo de su magistrado: pagar el 100% a los holdouts. "Las obligaciones del país no se extinguieron", subrayó.
El magistrado instó a la Argentina a que coopere con el mediador Daniel Pollack y busque de esta forma una solución rápida para resolver el problema.
Durante la audiencia, los representantes de la Argentina pidieron que se reemplace al mediador Daniel Pollack. Los abogados del fondo NML Capital, del multimillonario Paul Singer, aseguraron que las negociaciones con la Argentina deben continuar, pero pidieron al juez que no se reemplace al special master. El ministro de Economía, Axel Kicillof, ayer aseguró que Pollack "no tiene la más pálida idea de qué es el Mercosur, difícilmente tiene la preocupación que acusó sobre todos nosotros. No la tiene".
Ante estas idas y vueltas, Griesa aclaró que no cambiaría a Pollack porque ha demostrado avances en las negociaciones. "No hay razón para siquiera contemplar que otra persona sea special master. Tranquilicémonos con alguna idea de desconfianza. Podemos confiar en los hechos. Podemos confiar en las propuestas: esto no es un concurso de personalidades", concluyó, y dio la audiencia por terminada.
Más allá del reto de Griesa y el llamado a continuar las negociaciones, el juez no determinó qué ocurrirá con los u$s539 millones que la Argentina depositó en las cuentas del Bank of New York Mellon (BONY), destinado al pago del Discount de los bonistas reestructurados en los canjes 2005 y 2010. Ese pago está "freezado" en la cuenta del BONY en el Banco Central por orden del magistrado.
No es novedad que las declaraciones públicas del Gobierno irriten al juez neoyorquino, que se ha mostrado molesto por las palabras de funcionarios argentinos más de una vez, tanto en fallos escritos como en audiencias. La presidente Cristina Kirchner aseguró ayer en cadena nacional que "impedir que alguien pague no es default", en clara referencia a la decisión del juez de congelar los u$s539 millones del Bank of New York Mellon (BONY). Además, señaló que "la cesación de pagos no existe".